Básicamente, la propuesta del Estado consiste en construirles una vivienda de 60 metros cuadrados, con todos los servicio básicos, facilitar un camino de acceso a la misma y reducir la expropiación de 120 hectáreas a tan solo 12.

Como era de esperarse, los Escudero aceptaron la casa y el camino, pero manteniendo firme su oferta de ceder tan solo 9 hectáreas de su campo. Cabe recordar que los estudios del terreno han demostrado que, aproximadamente, tan solo 20 de las 120 hectáreas son productivas.

“Vamos a tratar entre las partes de acercar posiciones sobre esta diferencia de la superficie a expropiar”, dijo Allende ante la impresionante cantidad de medios que estaban esperando el resultado. “Creo que estamos muy cerca las partes de llegar a un entendimiento”, agregó el fiscal.

A su vez, el funcionario comentó que “no se habló” de dinero en toda la audiencia, algo que llama poderosamente la atención después de que se pasó toda la semana diciendo que los Escudero querían ceder 9 hectáreas y vender 6 a un precio “excesivo y totalmente abusivo”.

Según ambos abogados, otro tema que no se planteó durante la reunión de ayer fue que el Estado alquile una casa para que vivan los Escudero hasta que se resuelva el conflicto. “Hemos quedado en una situación de status quo, de no modificar nada, de descomprimir esta situación”, concluyó Allende.

“Hubo un acercamiento. El Estado plantea que necesitan 12. Este es el punto en que vamos a tener que seguir trabajando. Hay un compromiso de no agresión y quedaron suspendidos todos los términos procesales en el expediente. Vamos a ver en que punto el Estado vaya cediendo”, sostuvo, por su parte, Domeniconi, quien luego salió a la calle a contarle a las decenas de personas que fueron a hacerle el aguante a los Escudero.