Considera que los proyectos son crímenes de “lesa naturaleza”, una “destrucción anunciada” y un “ecocidio” de San Luis.
Después de casi dos años de lucha sistemática, y prácticamente en la soledad y el silenciamiento de diversos sectores de San Luis, se lleva acabo el primer Ecocidio en la provincia de San Luis, después de una larga negación de parte del Ministerio de Medio Ambiente de San Luis y su ministra Daiana Hissa, que dijo desconocer el emprendimiento megaturístico de la Florida, después de permanentes tramites burocráticos y administrativos de ida y vuelta, asegurando, en notas públicas, que “San Luis Agua S.E. es la autoridad de aplicación del Código de Agua, Ley Nº VI-0159-2004, debiendo realizar acciones tendientes a mantener un adecuado nivel de cantidad y calidad de aguas, evitando toda actividad que sea causal de contaminación y degradación”.
Diciendo que no tenía competencias para decidir sobre un área protegida, el Ministerio de Medio Ambiente se excusó y nunca entregó ninguna información sobre el pedido de Información ambiental de dicho proyecto.
Que se violó sistemáticamente la Ley nacional 25.675. Nunca el Ministerio dirigido por Daiana Hissa zonificó dicho lugar, ni ninguna área protegida de San Luis. Por otra parte la misma es un MONUMENTO ECOLÓGICO Y CULTURAL por Ley Nº IX-0324-2004 (5735) y además está contemplada dentro de las AREAS NATURALES PROTEGIDAS DE LA PROVINCIA DE SAN LUIS.
Ley N° IX-0309-2004 (5421) Art. 3º letra q): “Los embalses y diques son espejos de agua de importancia natural y turística que se incorporan al paisaje y que tienen utilidad para la regulación del caudal de ríos y arroyos, como contenedores para la provisión de agua dulce y para riego y al mismo tiempo para la realización de actividades turísticas, como la pesca deportiva y los deportes acuáticos. Además son refugio de numerosa variedad de aves que están relacionadas íntimamente con estos tipos de ambientes. Las razones expuestas son motivo suficiente para proteger estos ecosistemas artificiales e integrarlos a la Red, a esos efectos se deberá coordinar con organismos públicos que tengan ingerencia técnica en los mismos a fin de que el Plan de Manejo a elaborar los cuales deben delimitar el uso de los espejos de agua de la Provincia y un perilago de extensión acorde a las características de cada uno de ellos”.
Los argumentos jurídicos podrían ser largos de mencionar. Pese a ello, hoy ya no tienen importancia, estamos frente a una gran mentira, toda esta sinergia perversa entre distintos operadores del “circuito de negocios turísticos” y la codicia de funcionarios allegados a San Luis Agua y al Ministerio de Medio Ambiente serán los cómplices de la destrucción de unos de los lugares de mayor belleza y riqueza autóctona de la provincia de San Luis.
En una provincia con un Estado de derecho respetuoso de su Constitución y sus leyes, con efectivos ministros de Ambiente, idóneos, autónomos y capaces de garantizar a sus ciudadanos el derecho a gozar de un ambiente sano, jamás permitirían la violación a dos leyes provinciales y a la Ley general de medio Ambiente
La alianza y connivencia de San Luis Agua con atribuciones de un ministerio, y con la complicidad de la ministra de Medio Ambiente y del estado municipal de La Florida y el Trapiche, conjuntamente con empresas locales de San Luis y operadores de estos megaproyectos a nivel nacional y provincial, nos han impuesto, a como dé lugar, la cultura de la muerte sobre la cultura de la vida, donde la naturaleza requiere su hábitat para vivir y perpetuarse. Todos ellos están en una eterna relación capitalista con el medioambiente en función de su lógica de acumulación y del desarrollo capitalista de progreso y medio ambiente.
La sumisión brutal de la naturaleza al capital que se ha
implementado en San Luis pretende arrasar con todas las áreas protegidas de la provincia. De allí que intencionalmente jamás se llamó a zonificar ninguna de las áreas desde la vigencia de sus leyes de protección, hace más de 8 años. Por ello, repudio esta parodia obsecuente de querer presentarnos como que dichas zonas serán para el desarrollo local. La intención siempre fue y ha sido tener lugares privilegiados y Vip, en donde la zona al perilago será un beneficio para unos pocos.
Sin duda este interés particular de defensa de un lugar tiene que ver con las mas íntimas convicciones de la necesidad de preservar lo que queda, pero evidentemente, ante el silenciamiento de tantas ONGs colegas, de que nadie absolutamente nadie se interesara en interponer un recurso de amparo, y que pretendieran que una ONG que no posee recursos económicos se enfrentara a un sistema y un circuito de intereses comerciales, desde ya es una batalla perdida, en todo caso no es la primera, ni será la ultima .
En todo caso recomiendo que visten la Florida, su paisaje su flora y fauna, porque en 10 años mas, nada de lo que ha conocido será igual.
