Estaba cazando pajaritos cuando resbaló y cayó al agua.

Un niño de 10 años se ahogó, el pasado sábado a la tarde, en una represa artificial del cementerio parque Jardín del Recuerdo. El pequeño fue identificado como Kevin Gabriel Ojeda y vivía en un asentamiento ubicado a la vera de la Ruta Provincial N° 19. La laguna en cuestión es de 60 metros de largo, 25 de ancho y de 1,5 a 2 de profundidad.

El aviso del incidente se registró a las 14.30 horas, a través de un llamado anónimo al 911. Minutos después, el inspector Oros, acompañado de efectivos del Comando Radioeléctrico, llegó al lugar y, con su uniforme aún puesto, se metió al agua a buscar al niño, pero no logró encontrarlo.

Finalmente, fueron los buzos del cuerpo de Bomberos de la Provincia quienes lograron rescatar al niño. Mientras llegaba la ambulancia se le hizo reanimación cardiopulmonar, pero no surgió efecto y el niño ingresó sin vida a la guardia del Policlínico de San Luis.

Según averiguó la Policía, el pequeño cayó en la laguna mientras estaba cazando pajaritos junto a su hermanito de 8 años. Kevin resbaló en la orilla de la represa, cayó dentro de la misma y, por efecto del barro que había en el fondo, quedó atrapado y no logró salir.