“Cultivamos maíz en forma responsable y sustentable”, aseguraron a través de un comunicado de prensa.

Tras semanas de denuncias por la producción de alimentos transgénicos y manifestaciones públicas en su contra, la firma Monsanto, una productora de granos y cereales “acondicionados”, mandó un comunicado de prensa a medios locales y nacionales, en los cuales asegura, entre otras cosas, que “sólo” producen semillas de maíz en nuestra provincia. 

Cabe destacar que este tipo de denuncias en su contra, y el correspondiente comunicado a la prensa, son cuestiones de todos los días para esta multinacional norteamericana, quien ha tenido que lidiar con problemas similares en el resto de nuestro país, al igual que en Brazil, China, Haití e India.

A continuación, reproducimos el comunicado de Monsanto en su totalidad.
• Queremos llevar tranquilidad a toda la comunidad de Santa Rosa del Valle del Conlara. Cultivamos maíz en forma responsable y sustentable en Argentina desde hace varias décadas. Monsanto realiza actividades de producción de maíz en campos ubicados a 18 km al sur de la ciudad de Santa Rosa del Valle del Conlara, Provincia de San Luis. Monsanto no alquila ni tiene campos con actividades agrícolas en campos lindantes a la ciudad de Santa Rosa del Valle del Conlara.

• Monsanto está presente en la provincia de San Luis desde hace 14 años, siempre dedicados al cultivo de maíz en la zona rural del Valle de Santa Rosa del Conlara. Actualmente, realizamos la producción de maíz en 2.500 hectáreas (alquiladas) en toda la provincia de San Luis, de las cuales 1.700 están en la zona rural del Valle del Conlara. Esa producción se realiza en campos ubicados al sur de la ciudad de Santa Rosa y a 28 km de Merlo. Todas nuestras actividades agrícolas se realizan en cumplimiento de la normativa vigente.

• En esos campos, sólo realizamos producción de semillas de maíz. Las prácticas agronómicas que Monsanto aplica a estas producciones son las que aplican miles de productores y empresas semilleras en la provincia. La mejora continua mediante Buenas Prácticas Agronómicas contribuye a la conservación de recursos como el suelo y el agua, y a reducir las aplicaciones de fitosanitarios a las estrictamente necesarias. Asimismo, en los campos que alquilamos en Santa Rosa, se pone en práctica la rotación de cultivos que alterna la siembra de maíz con soja por parte de los productores locales, preservando así la fertilidad del suelo.

• Todos los insumos, agroquímicos y productos utilizados en dichos campos para el cultivo de maíz se encuentran aprobados por los organismos nacionales competentes en la materia: Comisión Nacional Asesora de Biotecnología Agropecuaria (CONABIA) y el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agropecuaria (SENASA).

• Toda la producción de nuestros cultivos de maíz en el Valle del Conlara está destinada a nuestra planta de procesamiento de semillas de maíz ubicada en la localidad de Rojas, provincia de Buenos Aires. Nuestra planta está radicada allí desde el año 1994, y provee semillas de maíz a miles de productores argentinos.

• Impulsamos una agricultura sustentable. El maíz jugará un rol clave en la búsqueda de soluciones para un contexto mundial que demanda cada vez más alimentos. Se estima que en los próximos 5 años, el área de maíz en la Argentina pasará de 4 a 8 Millones de hectáreas, impulsando el desarrollo de industrias de alto valor agregado y amigables con el medio ambiente. En línea con nuestro compromiso con la agricultura sustentable, desde Monsanto promovemos un esquema de rotación de cultivos que permita recuperar la fertilidad física y química de los suelos, como así también el uso responsable de agroquímicos acompañado de buenas prácticas agrícolas.

• Respetamos a los que opinan diferente, pero invitamos a toda la población a informarse por fuentes serias y confiables. Existe contundente evidencia científica acerca de la seguridad de los cultivos genéticamente modificados, también llamados transgénicos, después de más de 20 años de su uso en todo el mundo. Se trata de productos seguros que requieren de estudios rigurosos que garantizan la seguridad del medio ambiente y de las personas. Los sistemas de producción de hoy son mucho más sustentables que los de hace años atrás, precisamente gracias a la innovación y a las nuevas tecnologías. Argentina fue el primer país de Latinoamérica que implementó un sistema organizado para evaluar la bioseguridad de los cultivos genéticamente modificados, a través de la creación de un marco regulatorio para la realización de actividades con organismos vegetales genéticamente modificados.

• En 2012, 28 países que representan el 60% de la población mundial, sembraron cultivos genéticamente modificados. Muchos otros países importaron los granos cosechados y los alimentos derivados de cultivos biotecnológicos para alimentación humana y animal. Hasta hoy, los cultivos genéticamente modificados contribuyeron en reducir el uso de ingredientes activos de pesticidas en 473 millones de kilogramos, y contribuyeron sólo en 2011 en reducir en 23 mil millones de kilogramos las emisiones de dióxido de carbono. Gracias a la introducción de la biotecnología, otro de los beneficios fue la preservación de 108 millones de hectáreas de tierras, conservando la biodiversidad.

• Monsanto es una de tantas empresas nacionales e internacionales que vende en Argentina agroquímicos y cultivos genéticamente modificados. En los últimos 15 años, los transgénicos generaron 1,8 millones de empleos en la Argentina y un beneficio bruto económico para el país de 73 mil millones de dólares.

• Actualmente hay más de 17,3 millones de agricultores en todo el mundo que utilizan cultivos genéticamente modificados, totalizando 170 millones de hectáreas. Argentina tiene 23,9 millones de hectáreas de cultivos transgénicos (de maíz, soja y algodón), de las cuales 3,9 millones corresponden a cultivos de maíz. La expansión de las variedades transgénicas y la práctica de la siembra directa produjeron un impacto positivo en la estructura de los suelos y en la eficiencia energética de las labores agrícolas por medio de la reducción en la utilización de herbicidas con mayor poder residual y la reducción en el consumo de combustible de un 38%.

• Presente en la Argentina desde hace más de medio siglo, Monsanto es protagonista en la innovación agrícola. Más de 1.200 argentinos trabajan día a día en Monsanto Argentina para acercar soluciones al sector agropecuario que le permitan producir más en sus tierras, conservar más los recursos naturales tales como el agua y la energía, y también para mejorar la calidad de vida de la gente en las comunidades locales donde viven y operan. Los invitamos a conocer qué es y cómo opera Monsanto hoy y el valor de su innovación en biotecnología para los cultivos en www.monsanto.com.ar