De igual manera, solo ha sido necesario suspender las clases en un solo establecimiento, donde se produjo una explosión.

Ayer y anteayer, el ministro de Educación, Marcelo Sosa, dio detalles de los problemas que el frío extremo ha ocasionado en las diferentes escuelas públicas de la provincia. Hasta el día de ayer, solo se suspendieron las clases en un solo establecimiento. 

“Cuando hay un gran consumo de electricidad o calderas a gas, ese exceso de consumo que descienda la presión del gas o bien la tensión de la energía. Eso lleva a que los sistemas que funcionan con tal o cual energía, por una cuestión de seguridad, se apagan”, explicó Sosa, con respecto a denuncias que se realizaron a los medios los días pasados. “En gran porcentaje de las escuelas se está trabajando”, aseguró el ministro.

Sosa también comentó que en escuelas de Juana Koslay, Quines y San Francisco, donde las temperaturas fueron de unos 12 grados bajo cero, ha habido rotura de caños y “donde hay gas envasado se congeló”. “Esto se fue resolviendo con el correr de las horas”, dijo Sosa, quien señaló que en horas de la tarde la mayoría de las escuelas funcionaron normalmente.

Finalmente, el caso más extraño se dio en la escuela 431 Nelly Chenau de Vecino, ubicada en el barrio Jardín del Sur de la ciudad de Villa Mercedes. Donde en la madrugada del lunes se registró una explosión, que algunos inicialmente atribuyeron a un calefactor, que voló el cielo raso del techo, parantes y vigas. “Aparentemente ha habido una explosión, pero no se pueden establecer las causas, porque no hay, en principio, ningún calefactor quemado”, dijo Sosa, quien señaló que la Policía Científica está trabajando en el caso y que no quiere adelantar conclusiones. “Es muy extraño lo que ha ocurrido allí”, concluyó el ministro, confirmando que se suspendieron las clases en esa escuela.