Escudero Gauna estaba en el Juzgado en calidad de detenido y se abstuvo a declarar. Dentro de las 48 horas se debe resolver si se le dicta la prisión preventiva.
La causa comenzó por la denuncia de la juez de Instrucción Nº 3, Virginia Palacios, y del jefe de Policía, Oscar Papaño, quienes acusaron al abogado por haber llevado el 26 de diciembre del año pasado oficios truchos a dependencias policiales. El personal policial detectó por las numerosas irregularidades en las presentaciones realizadas en la mesa de entradas de la Jefatura Central. Se dice que en uno de los oficios en el que Palacios figura como firmante pero que el sello no corresponde a su Juzgado. Mientras que otro sello, perteneciente a una de sus secretarias no es el que se usa en las actuaciones judiciales de este tipo.
Ante la denuncia, se ordenó el allanamiento en el estudio de Escudero Gauna donde se hallaron oficios apócrifos, fojas arrancadas de expedientes. También se encontraron siete expedientes completos, tres de los cuales tuvieron que ser reconstruidos en su totalidad, ya que habían sido denunciados como robados en los juzgados donde tramitan las causas. Por otra parte, se detectaron diferencias caligráficas de las firmas y en el estilo de redacción.
La multa
“Aplicar al citado profesional una multa equivalente a dos sueldos de Juez de Cámara, es decir de 63.466,54), intimándolo a su ingreso, en el término de CINCO días, en cuenta de estos autos para su posterior transferencia según indique Secretaria Contable del Superior Tribunal de Justicia”, dice el decreto del 12 de marzo emitido por el Juzgado Laboral Nº 2.
El expediente en cuestión en el que Escudero Gauna representaba a la parte demandada, lo pidió en préstamo el 30 de noviembre de 2012. A pesar de la intimación del Juzgado para que devolviera el expediente y el posterior un mandamiento de secuestro del mismo, no se pudo recuperarlo. Por lo tanto, en agosto de 2013 se dispuso la reconstrucción del expediente.