Previo a esto, el FpV dio una conferencia de prensa para tratar de justificar su accionar, ante el hábito de Cambiemos de “hacer de la política una profesión de difamación”, dijo el presidente del bloque, Daniel González Espíndola, muy ofendido por los comentarios vertidos por el resto de la oposición con respecto a que el FpV vendió sus votos a cambio de no rechazar el veto fuera de término que el Gobierno hizo de la Ley de Bomberos Voluntarios. Cabe recordar que en esa polémica sesión de abril, el bloque de Espíndola se quedó con el cargo de prosecretario, el cual, según se había acordado inicialmente, iba a ir para Cambiemos, ya que el FpV ya tenía el de prosecretario legislativo.

En primer lugar, Espíndola hizo hincapié en que la ley no fue vetada por la Legislatura, lo cual es cierto. El veto del Gobierno provincial en realidad no ha sido aprobado ni rechazado, sino que “Compromiso para la Victoria” lo mandó a comisión para “ser analizada”, de donde no se ha movido en cuatro meses. Que el veto esté congelado en comisión tiene, llevándolo a la práctica, el mismo efecto que si hubiese sido aprobado, ya que impide que la ley entre en vigencia.

Luego, el FpV se escudó en la posibilidad de que, si el veto se pasaba a archivo y la ley entraba en vigencia, el proceso se podría haber judicializado “en el mejor de los casos”, ya que el gobernador, Alberto Rodríguez Saá, hizo serios cuestionamientos a la misma. El principal de ellos era que otorgaba a los cuarteles la facultad de designar los beneficiarios de las pensiones, seguros y obras sociales que la ley les otorgaba a los bomberos.

“El Ejecutivo dijo, ‘esto no lo puede hacer un cuartel de bomberos, lo tiene que hacer el Poder Ejecutivo’. El otro cuestionamiento tiene que ver con donde se establecía un sistema para entregarles casas a los bomberos, y se dice que, bueno, por el hecho de ser bombero no significa que tienen que tener el privilegio de tener una casa sobre el resto de las personas”, dijo Espíndola.

A todo esto, cabe recordar que el proyecto original tuvo su origen dentro del FpV, siendo su autor principal el ahora ex diputado Luis Foresto, allá por 2014. A fines de 2015 el proyecto fue aprobado por unanimidad, sin que nadie objetara nada al respecto, salvo Rodríguez Saá, quien lo vetó apenas asumió. Poco más de 4 meses después, el FpV votó para enviar el veto del Gobernador a comisión.

Este extraño cambio de actitud parece indicar que el FpV ahora responde a los deseos del Gobierno provincial; o que el proyecto no fue debidamente analizado y confeccionado antes de ser aprobado. Consultado al respecto, Espíndola dijo que el tema merece “un análisis profundo”. Obviamente, ese comentario condujo a que este medio le preguntara si el proyecto tuvo un análisis profundo antes de ser aprobado. “Tuvo un análisis profundo y la visión de lo que nosotros representamos. El Gobernador ha hecho algunos planteos, que son… que creo que los podemos llegar a corregir, que implican un análisis y ponernos de acuerdo”, fue la incongruente respuesta de Espíndola, sosteniendo al mismo tiempo que la ley tuvo “un análisis profundo”, pero que hay que corregir lo que dice Rodríguez Saá.

Cabe destacar además que si bien González Espíndola no consideró necesario tratar ayer la Ley de Bomberos Voluntarios, el diputado sí consideró importante presentar proyectos para declarar de interés legislativo el Día del Ferretero y del Abogado, desperdiciando además varios minutos de sesión “informando” sobre estos temas. Retrotrayéndonos al año pasado, González Espíndola fue el “autor” de un proyecto de ley llamado “Ejercer la juventud”, el cual era un calco de una ley chaqueña, algo que obvió comentar cuando lo presentó.

“Aparte, hoy te hago otra pregunta, ¿qué tiene que ver el incendio con la ley?”,
aportó el ex radical y ahora kirchnerista Sergio Guardia, saltando a la defensa de Espíndola, quien no podía precisar un solo avance que se haya hecho con respecto a la ley desde que fue cajoneada en comisión.

Por el lado de Compromiso Federal, el vicepresidente del bloque, Luis Martínez, remarcó las mismas objeciones a la ley que González Espíndola, pero explicándolas mucho mejor. “El problema era que el proveedor de la información y quien disponía de quienes debían ser los beneficiarios en la ley no estaba bien organizado, porque se lo había delegado precisamente a los cuerpos de bomberos voluntarios”, dijo Martínez, asegurando que muchos cuarteles son asociaciones civiles que “están en estado irregular” y que “no pueden acreditar con continuidad quienes son los miembros del cuerpo activo”.

“Por eso, avanzar hoy sobre una ley vetada, que tiene dificultades, es más una cuestión política y demagógica de la fecha, sobre todo en la sensibilidad que está viviendo el pueblo de San Luis. Lo que pasa es que no podemos cometer dos veces el error de hacer algo que quizás no funcione en la práctica”, dijo Martínez, clasificando lo que pasó como “un pecado de inocencia” y reconociendo que el tema no fue debidamente analizado previo a su aprobación.

De esta manera, y con las posturas más que claras antes de empezar la sesión, no fue ninguna sorpresa cuando el tratamiento sobre tablas del tema fue rechazado en la sesión de ayer. Cambiemos, Mercedinos por el Cambio y Nacional y Popular votaron a favor del tratamiento, pero los 16 votos que ayer sumaron no alcanzaron para derrotar a los 17 de Compromiso Federal y el Frente para la Victoria.

Cabe destacar un bizarro episodio que se vivió durante la sesión, cuando Compromiso Federal, aparentemente con la intención de dejar sin quórum a la sesión para así no tratar la Ley de Bomberos, se retiró del recinto, volviendo unos minutos más tarde, ante las risas de los bloques de la oposición.

En este marco, también cabe señalar que de los cinco diputados que estuvieron presentes en la conferencia, solo dos, Mario Alume y Daniel González Espíndola, terminaron ratificando su postura inicial, ya que Guardia, que parece cambiar de parecer como cambia de partido, votó junto con el resto de la oposición. Por su parte, Francisco Irusta y Sergio Amieva se retiraron del recinto para no tener que pagar el costo político de votar en contra de los bomberos. Claramente, las cosas habían cambiado un montón entre las 10 de la mañana, cuando se dio la conferencia de prensa, y las 17 horas, cuando el tema se trató en el recinto.

“Las prioridades del Gobierno Provincial no son las que tiene la gente y eso nos llama la atención. Nos preocupa que destinen 6 millones de pesos para capacitar a las asociaciones de bomberos, pero destinen 16 millones en una obra innecesaria como la réplica de la Casa de Tucumán, inaugurada por Rodríguez Saá mientras el fuego continuaba”, criticó el diputado radical Juan Manuel Rigau. “Pudieron haberse quemado casas y pueblos de no haber sido por los bomberos voluntarios. Por eso nos da vergüenza cuando vemos que invierten millones y millones en el parque La Pedrera que en los cuarteles. ¿Cómo puede ser que un Gobierno le prive beneficios a personas que realizan una labor tan importante para el pueblo de San Luis?”, aportó el diputado Fidel Haddad.