La secretaria de Vivienda y vecinos hablaron del tema. La secretaria de Vivienda, Ángela Gutiérrez de Gatto, recibió ayer a familias de los barrios 111 y 30 viviendas, pertenecientes al ex Plan Solidaridad, a partir de una nota dirigida a la funcionaria días atrás. Debido a los defectos de la construcción de 141 viviendas, el Gobierno se hará cargo de las reparaciones

En la misma, los propietarios denunciaron la precariedad en la que viven: “Nos entregaron la casa el 25 de abril de 2015 y cuando fue la primera lluvia, al mes de mudarnos, se nos empezó a hundir el pozo séptico, se nos llueven mucho los techos, las paredes están quebradas, el terreno está cediendo y los pozos se están llevando las casas”, indicó una de las vecinas.

“Pasa en todo el barrio. Hace casi dos años que estamos así. Hicimos un corte para que nos escucharan y nos dieran una solución, lo volvimos a hacer y no tuvimos respuesta. Ahora nos vamos tranquilas porque vamos a tener solución con nuestras casas, pero hay que tener paciencia porque no es ya”, agregó.

Tras la reunión, Gatto explicó que “los vecinos nos plantearon un problema muy crudo, las casas se les están hundiendo y esta situación lleva casi dos años”. Además, señaló que le llevó la inquietud al gobernador Alberto Rodríguez Saá, quien “decidió hacerse cargo de la situación, al igual que en los casos de La Toma y el Bº Estrella del Sur; se conmovió con la problemática porque, como siempre dice: ‘primero los humildes’”.

En relación a las soluciones que llevarán a los damnificados, la funcionaria anunció que “trabajaremos juntos con el Ministerio de Obras Públicas e Infraestructura, haciendo un relevamiento casa por casa para saber cuál es la situación de ellos, para lograr el resultado final, que es una casa digna donde la familia pueda vivir tranquila”.

Gatto consideró que en la gestión anterior “abusaron de la necesidad de la gente humilde, eso me duele mucho y al Gobernador también, por eso le dio prioridad a solucionar el problema de estas viviendas”.

A la hora de estudiar el origen de esta problemática, Gatto entiende que “hubo un hecho de corrupción, que ya fue denunciado y que tiene como víctima a la gente más humilde. Nadie trabajó con seriedad en hacer estas casas, incluso al principio pusieron mujeres a trabajar cuando nunca debieron estar haciéndolo”.

“Ahora debemos mirar al futuro para que las familias puedan realizar sus sueños y ser felices en su casa, en una vivienda digna. Eso es a lo que aspiramos y para lo que vamos a trabajar, en lo demás ya se actuó”, concluyó.