“Una cápita, hoy actualizada para la cantidad de afiliados que tenemos nosotros, está alrededor de 6 millones. Alderete solo me dejó debiendo 12 cápitas. Él me dejo debiendo 60 millones. Después De la Rúa dejó debiendo 5 cápitas y Graciela Ocaña 5 cápitas. Es muy difícil porque el PAMI no está nunca en el veraz. Nosotros cuando cometemos un acto ilícito, de no pagar una cosa, aparecemos en el veraz y no nos dan crédito en ningún lado.

Lo único que el sanatorio le debe a sus empleados es el aguinaldo, lo cual, aseguró Agúndez, será saldado con un adelanto que le va a hacer PAMI.

Lo que es más, el médico aseguró que, a pesar de lo denunciado por mucha gente, durante todo este mes pasado no se dejaron de atender urgencias. “En este momento tenemos 42 internados de urgencias y emergencias, la mayoría quirúrgicas, a pesar de la gestión que estábamos haciendo para recomponer la situación con PAMI. Eso nunca lo dejamos de hacer en todo el mes que no tuvimos prestaciones”, dijo Agúndez.

Según el médico, el principal problema que tiene el sanatorio es con los médicos de cabecera. “Viene un paciente y dice, ‘quiero hacerme una tomografía porque me duele la cabeza’. Tráigame por lo menos una placa de columna cervical para ver si tiene un pinzamiento que le produce el dolor de cabeza. Esa es la gran disputa que tenemos con los médicos de cabecera, que recetan y se acabó. Y no es así, son abusadores del sistema”, disparó Agúndez.

Y si bien el médico el primer lugar dijo que “los afiliados de PAMI son todos buenos”, luego comentó que los pacientes van “muchas veces van con imposiciones” a pedirles que les hagan diferentes estudios, a pesar de no tener un diagnóstico que lo respalde.

Por último, teniendo en cuenta que PAMI no ha dado el brazo a torcer y de que ya no pagará por prestación, sino por cápita, Agúndez adelantó que van a tener que limitar y frenar “algunas prácticas que se piden de gusto y que no se deben realizar”.