“La reforma previsional tiene un sentido que es hacer más equitativo y sustentable el sistema de seguridad social que tenemos actualmente. La reforma prevé tres cambios muy importantes. Uno de ellos es la supresión de las jubilaciones de privilegio, que comprometen el 9% del presupuesto que el Estado destina a la seguridad social y los beneficiarios de esas jubilaciones, que por lo general exceden los $100.000, es solo el 3% de los jubilados. Por otra parte se garantiza, en este proyecto de reforma, el 82% para aquellos beneficiarios que están cobrando haberes mínimos. Y finalmente, la modificación del índice de movilidad jubilatoria, usando un índice que conjuga inflación y evolución salarial. Esto garantiza que nuestros jubilados van a tener un impacto positivo en sus haberes, en el curso del año, del 5%”, dijo Pereira, asegurando que “no hay, como se dice, un ajuste o un recorte de los haberes”.
Todo lo contrario, el gerente de Anses aseguró que “lo que se está haciendo es modificar la fórmula para preservar el valor adquisitivo del salario de los jubilados”. Además, Pereira comentó que la fórmula actual llevó a que, en 2010, 2012 y 2014, los jubilados tuvieran un aumento inferior a la inflación que se registró ese año.
En cuanto a la reforma laboral, Pereira dijo que permitirá generar “empleo de calidad” y “suprimir el trabajo informal y tener una inversión social que sea sustentable en el tiempo”.
Pereira luego le cedió la palabra a su par de Merlo, Servando Etchepare, quien aseguró que lo que se está debatiendo son dos modelos de país, uno donde las leyes se discutan “en el ámbito que corresponde”, y otro que es “de una dictadura, ya no en mano de militares, sino en manos de civiles violentos”.
Luego tomó la palabra el diputado Alejandro Cacace, quien también hizo en hincapié en que “no hay recorte de haberes”. Además, recordó el veto que Cristina Fernández de Kirchner hizo de la ley que aseguraba el 82% móvil para los jubilados. “La ciudadanía en concreto se ha visto beneficiada por las políticas de Gobierno. Ha visto una evolución favorable en la situación sociopolítica del país y, a partir de eso, ha realizado un respaldo contundente en las urnas. Esto es claro”, continuó el diputado, sosteniendo que ha habido legisladores nacionales que han buscado confrontar al Gobierno “y pretender desde la minoría, que debe ser escuchada y respetada, alzarse en contra de los procedimientos parlamentarios”.
Cacace también dijo que el Gobierno Nacional de Macri ha mostrado, a lo largo de estos dos años, “una constante disposición a poder enmendar los anuncios de políticas”. “Pero desde luego siempre hay un límite entre lo que es el diálogo democrático, en el marco de las instituciones, y lo que es el ejercicio de la violencia para comprometer el funcionamiento de las instituciones”, concluyó el diputado provincial.
La marcha en contra
Un par de horas después de esta conferencia, cientos de personas marcharon por el centro puntano, convocados por diferentes gremios provinciales, como UTEP, Sadop, Sidiu y ATE, entre otros. La convocatoria de gente fue realmente muy buena, con cientos de personas que casi cubrieron dos cuadras alrededor de plaza Pringles. Desde la primera marcha #NiUnaMenos que no se veía tanta gente marchando por el centro de la ciudad.
La marcha partió, como es costumbre, de la esquina del Correo, para luego subir por Junín y tomar Rivadavia hasta plaza Independencia.