Desde hace algunos años las Redes Sociales vienen ganando terreno frente a los métodos tradicionales de búsqueda laboral. Son un aliado tanto para los empleadores como para aquellos que buscan un cambio laboral.

Para quienes quieren encontrar un nuevo empleo, las redes permiten dar a conocer el perfil profesional y conectarse con colegas o empresas. Incluso sirven para dar aviso en simultaneo a todos los contactos.

Además, uno de los recursos más utilizados por las empresas y los servicios de empleo para reclutar candidatos es la posibilidad de cargar el curriculum en su web. En base al perfil requerido se pueden contactar directamente con los postulantes haciendo más eficiente el proceso.

Ahora bien, cuando las búsquedas se publican en las redes, éstas se viralizan en pocos minutos; se comparten en los perfiles de los usuarios, se “etiquetan” amigos a los que les podría interesar la oferta y hasta pueden migrar de una plataforma a otra, como es el caso del uso del Whatsapp donde el aviso se envía a los contactos.

Ernesto Tocker, director del Servicio de Empleo AMIA, brinda una serie de consejos básicos para quienes se inclinan por este tipo de herramientas:
Definir si las Redes Sociales a utilizar serán para uso personal o para exposición profesional: de eso dependerá si el perfil es público o privado, la foto de perfil, y las publicaciones que se realicen. No se deben mezclar ambos. Lo ideal es segmentar qué se publica en cada una, pero hay que recordar que todas pueden ser objeto de evaluación (screening).

Tener el perfil completo y visible: dedicarle tiempo a la redacción del contenido. Armar un perfil detallado, especificado y completo. Configurar el perfil en modo público, de esa manera los reclutadores y colegas podrán ponerse en contacto.
Elegir una foto de perfil adecuada: la imagen adquiere un alto nivel de importancia pues es la cara visible. Debe ser formal y adecuada al contexto laboral.

Mantener el perfil actualizado: éste nunca debe considerarse terminado. Siempre hay información que agregar, modificar o actualizar. Comunicar el objetivo laboral deseado.

Buscar contactos: las mayores oportunidades laborales están dadas en base a la visibilidad. Tener contactos afines al perfil laboral permite acotar la búsqueda dentro de los parámetros deseados.

Participar en grupos: es muy importante formar parte de los grupos de afinidad, bolsas de trabajo y circuitos propios del perfil de interés. En ellos además se difunden ofertas laborales, información de actualidad y datos específicos que pueden ser útiles al momento de buscar empleo.

Ser activo: las redes sociales son un espacio que brindan gran visibilidad. Es fundamental estar en movimiento; interactuar con otros usuarios, comentar notas, compartir contenidos y estar constantemente conectados.

Una de las redes sociales más utilizadas para buscar empleo es Linkedin, a su vez Facebook, Twitter e Instagram se pueden aprovechar con el mismo fin.

Algunas cifras de interés

– 50% de las empresas del mundo ya emplea las Redes Sociales para buscar trabajadores.
– 1 de cada 3 empleadores rechazaron candidatos para puestos clave basados en información que encontraron sobre ellos en internet. A su vez los responsables de Recursos Humanos reconocen haber consultado la actividad en Redes Sociales de los candidatos a las propuestas de empleo que le llegan por ese medio.
– 80% de las organizaciones utilizan Linkedin para encontrar talentos.
– 76% de los trabajadores interactúan en las Redes Sociales a fin de encontrar trabajo.