El día de ayer, el secretario de Desarrollo Social de la Municipalidad de San Luis, Sebastián Páez Segalá, dio a conocer un relevamiento socioeconómico que se realizó del barrio La República y las acciones que allí el municipio está llevando a cabo y planeando a futuro.
Además, el funcionario municipal se refirió al reclamo de los vecinos del barrio con respecto a la recolección de basura. Al respecto, Páez Segalá reconoció que los camiones recolectores no entran al barrio y explicó que esto se debe a que los postes y el cableado realizado por los vecinos es muy bajo. “Con la Dirección de Alumbrado Público, estamos haciendo la instalación de postes luminarios. Los postes o el cableado hecho por los mismos vecinos, se encuentran a un nivel no apto para que puedan entrar los camiones de residuos, entonces se está trabajando en instalar los postes para poder elevar el cableado y así pueden ingresar los camiones. Además estamos desarrollando la desratización y control de plagas con la Dirección de Medio Ambiente; y control de reproducción animal y vacunación para los animales domésticos a través de la Dirección de Zoonosis”, dijo el funcionario municipal respecto a este tema.
Actualmente, según explicó Javier Aguirre, vecino y responsable del centro de gestión municipal del barrio La República, la gente del barrio quema la basura en los patios de su casa, pero igual hay personas que la arrojan en diferentes lugares públicos. “Hay que concientizar a la gente para que no haga eso”, dijo Aguirre.
Otro tema que ha sido motivo de reclamos es el agua potable. Al respecto, el secretario señaló que la red de agua, que comenzó a construirse cuando el asentamiento fue expropiado el año pasado y convertido oficialmente en un barrio, alcanza aproximadamente al 30% de los vecinos. Páez Segalá destacó que esta obra se realiza mediante administración municipal y que, desgraciadamente, más rápido no se puede avanzar.
En cuanto a cuándo pueden llegar a terminar las obras del alumbrado y el agua, el funcionario no descartó que puedan extenderse hasta mitad de este año.
Con respecto al relevamiento, el mismo que arroja que en el barrio viven 1.865 personas y que 1.020 son mayores de edad. De esas 1.020 personas mayores de 18 años, solamente el 32% tuvo o tiene acceso a la educación. Esto significa que han terminado la secundaria o que se encuentran en proceso de hacerlo. Eso quiere que el 68% no ha terminado sus estudios. Volviendo al total de estos 1.020 adultos, el estudio también revela los siguientes datos:
A raíz de esto, una de las acciones que ha impulsado el municipio es elevar una nota al Ministerio de Educación de la Provincia para que instrumente el plan FinEs, de terminalidad educativa, junto a la ciudad, ya que la educación preescolar, primaria y secundaria dependen de las resoluciones ministeriales a nivel provincial.
“En cuanto al tema ocupacional, de las 1.865 personas, el 31% está desocupado. Es un nivel muy alto. A raíz de esto, nosotros tenemos un programa de capacitación de oficios, que se llama Capaces. Vamos a incrementar el nivel de posibilidades y de cupos, para que estas personas puedan acceder a un oficio determinado y ofrecerles microcréditos para aquellos que quieran emprender a partir del mismo”, dijo Páez Segalá, quien luego presentó el siguiente gráfico:
“La asistencia social que desde el mes de agosto estamos brindando a través del Centro de Gestión Municipal (CGM) 9 de Julio, comprende una bloquera social que hemos instalado allí y, logísticamente, también estamos garantizando una alimentación sana y saludable a través del comedor público social que también se encuentra en el barrio 9 de Julio, en las inmediaciones del barrio La República”, destacó Páez Segalá, quien además mostró un gráfico con respecto a la nacionalidad de los habitantes del barrio, destacando que el 94% de ellos son argentinos.
Por su parte, Liliana Urbina, directora de Salud, describió el trabajo realizado por el tráiler de Salud municipal y los agentes sanitarios. “Desde la Dirección de Salud, comenzamos esta semana con un relevamiento de las condiciones socio sanitarias, donde el aspecto sanitario se relaciona con la cuestión social. Vamos a continuar hasta completar todas las manzanas del barrio, todos los vecinos del barrio. Queremos tener ideas claras, números claros, datos claros fiables y confiables para luego tomar todas las decisiones”, dijo Urbina.
“Hemos estado prestando servicios, específicamente de atención pediátrica, control de niños sanos, atención de adultos, de médicos generalistas. Con un tráiler sanitario que tiene un consultorio generalista y uno obstétrico. En este consultorio nuestra obstetra realiza los papanicolau que son para la prevención del cáncer cérvico uterino. Se hicieron bastantes PAP e implantes para prevención del embarazo”, continuó la directora, detallando los servicios que se prestan en el barrio.
“Son números pequeños por el momento, pero este es un inicio de un trabajo que va a continuar en el barrio La República y en otros barrios que están en condiciones de vulnerabilidad económica”, dijo Urbina, comentando que el objetivo es visitar cada uno de los 10 asentamientos de la ciudad al menos una vez por mes. “Es más eficiente limitarnos a los barrios que tienen mayor vulnerabilidad, quedarse más días y volver más seguido”, concluyó la directora de Salud.