Al igual que en el Senado y la Cámara de Diputados, en el Concejo Deliberante tampoco hubo quórum para sesionar esta semana. A diferencia de la Legislatura puntana, donde senadores y diputados que cobran alrededor de 4 millones de pesos por mes decidieron tomarse vacaciones que no están establecidas en el reglamento, en el Concejo la falta de quórum se debió a que la oposición decidió no dar quórum, aprovechando la ausencia de la concejal Laura Sánchez.
Sánchez, concejal electa por las filas de Sergio Tamayo que en cuanto asumió se pasó al nuevo oficialismo municipal, anunció públicamente que tiene cáncer. A raíz de esto, la concejal solicitó una “licencia por razones particulares”. La nota con este pedido figuraba en el orden del día de este jueves, con giro a las comisiones de Interbloque y a la de Legislación e Interpretación.
La licencia de Sánchez seguramente implicará múltiples ausencias que le permitirán a la oposición dejar sin quórum una que otra sesión.
Cabe recordar que el Concejo capitalino está compuesto por 15 concejales, a razón de 7 por la oposición y 8 por el oficialismo, gracias a la “tránsfugueada” de Sánchez. Por ende, toda ausencia de alguien del oficialismo podrá ser aprovechada por la oposición para dejar una sesión sin quórum y frenar las iniciativas de sus rivales políticos que este año, a su vez, han frenado todas las de ellos. A su vez, dejar la sesión sin quórum es la mejor opción de la oposición, ya que si asisten y empatan una votación 7 a 7, el desempate queda en manos de la presidenta del Concejo, Agustina Arancibia Rodríguez, quien integra las filas del oficialismo.
En cuanto al día de hoy, el oficialismo esperó alrededor de media hora que los ediles del PJ entraran al recinto, donde esperaban, por ejemplo, jóvenes del grupo scout Ceferino Namuncurá, ya que había un proyecto para declarar de interés legislativo sus actividades.