Este martes, el oficialismo del Senado casi que terminó de borrar las polémicas designaciones que se produjeron en esta cámara a fines del año pasado. En concreto, hoy se aprobó por mayoría y se produjo la remoción de las prosecretarias Administrativa y Legislativa, que integran la mesa directiva del Senado tras ser nombradas en una sesión a fines de noviembre de 2023. Se trata de la exintendenta ilegal María Angélica Torrontegui, quien en esa bochornosa sesión votó por sí misma, y de Sofía Aguilera, amiga de la exsenadora, y actual intendenta de Nueva Galia, Diamela Freixes.
Aguilera estuvo presente durante toda la sesión, acompañada de su pequeño hijo, y cuando se produjo la votación de su remoción les gritó a los senadores cosas como “voten mirándole la cara a mi hijo” y “por plata hacen todo”, especialmente a Diego García y Juan Carlos García, ya que ambos fueron electos por el PJ y ahora son aliados del poggismo. En declaraciones a la prensa tras la sesión, la mujer contó que el cargo le fue “otorgado” por Freixes. En este sentido, cabe aclarar que nombramiento fue votado por el Senado, a propuesta de Freixes.
Por otro lado, su remoción se produjo, aseguró, sin ningún tipo de aviso. “Se manejó entre ellos, sí. A mí jamás me llamaron ni me notificaron de nada. Yo ostento un cargo de empleada pública, el cual en abril no salió la renovación. Me fui a reclamar, ya me lo renovaron, tengo 11 años de antigüedad, pero el 30 de septiembre se termina la renovación y me lo pueden renovar o no”, dijo Aguilera, señalando además como Juan Carlos García votó a favor de su nombramiento tan solo unos meses atrás y que ahora está “traicionando” los acuerdos políticos celebrados a fines del año pasado. Aguilera contó además que, en todos estos meses, solo iba a cumplir horario ya que nunca le dieron “un espacio de trabajo ni tarea”.
Quienes claramente hicieron un nuevo acuerdo político fueron Héctor Camilli y Jessica Rojo, que hasta hoy, se desempeñaban como secretarios Administrativo y Legislativa, respectivamente. Camilli y Rojo presentaron sus renuncias como secretarios y, en esta misma sesión, fueron nombrados como prosecretarios, en reemplazo de Torrontegui y Aguilera, quienes no presentaron sus renuncias.
Por último, como nuevos secretarios fueron nombrados Soledad Giboín (Administrativa) y Said Alume (Legislativo), hijo del dirigente adolfista Augusto Alume, con amplia experiencia en este cargo, ya que lo ocupó por varios años en la Cámara de Diputados.