En diálogo con La Gaceta Digital, Soledad Correa, secretaria General de UTEP, advirtió sobre despidos masivos que ya han sido comunicados para fin de año en distintas escuelas públicas autogestionadas, como ya pasó con la Luis Lusquiños, en mayo de este año. Ese mes vencían muchos contratos, pero ante la polémica que despertó ese caso, con un cambio radical en pleno año académico, en las demás escuelas autogestionadas se extendieron los contratos hasta el 31 de diciembre y ya comenzaron a llegar notificaciones de que los mismos no se renovarán.

“Por ejemplo, en la escuela Nelson Mandela, como hay cambio de asociación que la administra, quedan todos desafectados”, manifestó Correa, quien además remarcó que el cambio de asociación que administra esta escuela no se realizó por concurso, como debe ser. En una nota con La Gaceta Digital, la directora de Escuelas Privadas y Autogestionadas, Natalia Endeiza, sostuvo que la idea era seleccionar estas asociaciones por concurso, y no a dedo como se ha venido haciendo históricamente.

Según Correa, esta no renovación de contratos también se va a dar en escuela pública Mahatma Gandhi de Villa Mercedes y en las generativas Capitán de Pájaros de San Luis Capital y Nueva Humanidad en Potrero de los Funes; dejando a decenas de docentes sin su fuente de trabajo.

Cabe recordar que estas escuelas autogestionadas o generativas funcionan como si fueran privadas, pero los recursos los provee el Estado, incluidos los docentes, quienes son contratados a través de la Universidad de La Punta, pero dependen del Ministerio de Educación. “Contratá a quien quieras. Despedilo cuando quieras. Es la única parte que autogestionan las autogestionadas. Con el nombre que quieran. Entonces, es una mentira. El Gobierno se está desentendiendo de la educación pública”, señaló Correa en mayo de este año.

“Vos imaginate que hay personas con 10 o 15 años de antigüedad a las que les siguen haciendo contratos de seis meses, de un año. No existe en términos legales este tipo de contratación. Entonces, todos los diciembres de estos últimos 15 años, nos hemos encontrado con las mismas circunstancias. Con el agravante que, por ejemplo, en la Nelson Mandela, hay docentes que quedan despedidas, que fueron notificadas, que están embarazadas”, manifestó Correa.

“Entonces, básicamente lo que se le pide al Gobernador es que intervenga, pero que intervenga de manera definitiva. ¿Y qué es de manera definitiva? Estos trabajadores docentes no se ajustan al estatuto del docente, que es nuestra ley, ni se ajustan a las leyes laborales”, añadió la secretaria general de UTEP, gremio que siempre se ha opuesta a esta modalidad de contratación.

Además, UTEP ha solicitado, en notas cursadas tanto a la ULP como al Ministerio de Educación, que se les conceda una audiencia y también la creación de una mesa técnica de la que participen ambas instituciones para “regularizar el régimen de contratación de que ha vulnerado los derechos de los/las trabajadores de la educación históricamente”.

Lamentablemente, esta mesa todavía no se ha concretado y se sigue dando esta situación en que “cada uno se tira la pelota y el tiempo va corriendo”, mientras que los docentes siguen con estos contratos fraudulentos.