Los sindicatos estatales ATE, APTS, UTEP y Sijupu presentarán una nota al gobernador Claudio Poggi solicitando una reunión para tratar la situación salarial de los trabajadores estatales. El pedido fue anunciado en una conferencia de prensa, donde los gremialistas también expresaron su rechazo al incremento del 25% que el mandatario comunicó anoche a través del canal oficial San Luis+.


Luciano Cardarelli, secretario general del Sijupu, explicó que la recomposición salarial anunciada por el Gobierno está “un año atrasada” y criticó que no fue consultada con ninguno de los sindicatos que representan a los estatales. “Con la primera recomposición que dio el Gobernador en mayo del año pasado, pudimos cubrir la inflación de diciembre de 2023. Con la segunda y última recomposición que dio el gobernador, que fue un veinte por ciento en cuatro veces pudimos recuperar la inflación de enero del 2024. Ahora, con el 12,5% (anunciado ayer) todavía no llegamos a recuperar la inflación de febrero de 2024, que si los números no fallan fue del 13,2%. O sea, estamos un año para atrás. Al paso que vamos, yo creo que no le va a alcanzar la gestión para poder terminar de recomponer los salarios estatales”, dijo el judicial.

En la misma línea, Fernando Gatica, secretario general de ATE, señaló que “el camino no es la imposición de un monto salarial que al gobernador le parece” y remarcó que esperaban “negociaciones” o, al menos, “una mesa salarial” para discutir el aumento y otras cuestiones pendientes, como recategorizaciones y la situación de los trabajadores municipales. “El rechazo es unificado porque esta recomposición salarial no ha sido atendida con estas medidas”, sostuvo.

“Tenemos salarios municipales que no superan la línea de la indigencia, los $350.000 que están ganando hoy en promedio los trabajadores municipales, para nosotros es una preocupación y el Gobierno no se puede sacar de encima esa responsabilidad”, continuó Gatica quien, en cuanto a la posibilidad de medidas de fuerza, advirtió que “están latentes permanentemente” y que “hay clima” para llevarlas adelante.

APTS también dejó abierta la posibilidad de un paro. “Si es necesario, las bases van a parar”, aseguró su secretaria gremial, Carola Piasco. La dirigente también criticó el porcentaje de aumento y afirmó que “esperaban más de un 30% para hacer algo de equilibrio”. “El gobernador dice que quiere gobernar para todos. La mejor manera de hacerlo sería reconociendo un salario digno”, agregó.

Si bien en 14 meses Poggi jamás ha recibido a un sindicato, ni lo hizo en su gobernación anterior, Piasco señaló que seguirán apostando al diálogo. “Creo que soy una convencida de que con el diálogo se pueden llegar a grandes cosas. Él el año pasado demostró que así no podía suceder, pero bueno, seguimos apostando a lo mismo y obviamente escuchando las bases”, dijo la secretaria gremial de APTS.

Por su parte, Carlos Peralta, secretario general de UTEP, manifestó que “una vez más no han sido escuchados” y alertó que el aumento “acrecienta la inequidad entre los cargos de maestros y las horas cátedra”, ya que a los primeros “no se les permite tomar el doble cargo”. Asimismo, indicó que “hace 42 años que los aumentos se dan de manera unilateral” y que “la última vez que hubo negociación fue hace 15 años”.

“La única vez que en esta provincia hubo una mesa de negociación fue la docente del año 2010. Después de que en el 2009 no hubo aumentos al básico, sino cifras en negro, donde en el 2010 se ofreció solamente un 10%. Ahí rebalsó el vaso. Hubo 35 días de paro. Y ahí empezaron los aumentos en blanco en la provincia de San Luis”, recordó Peralta. Sobre el inicio del ciclo lectivo, afirmó que hasta el momento será normal, pero anunció que desde UTEP realizarán una encuesta entre los docentes para determinar los pasos a seguir.

“No podemos tener calidad educativa si el docente que está frente al aula está pensando cómo llegar a fin de mes, que le aumenta el alquiler entre 50.000 y 60.000 pesos por mes y está pensando en vender la cartilla, el perfume o lo que sea para poder llegar a fin de mes”, dijo, contundentemente, Peralta.

Por otro lado, Peralta cuestionó el impacto de las cifras no remunerativas en los salarios y en los aportes jubilatorios, ya que este porcentaje ha crecido considerablemente en los últimos meses. “Una maestra después de 25 años de trabajo se jubila con 450.000 pesos”, ejemplificó. También recordó que, en 2010, tras 35 días de paro docente, se logró la última mesa de negociación y que “desde entonces nunca más hubo una”.

Finalmente, resaltó la necesidad de un ámbito de discusión con el Gobierno: “Si no hay diálogo, los problemas que tenemos hace cuatro décadas van a seguir estando”.