El pasado sábado 8 de febrero, Buena Esperanza vivió su hito cultural con una gran jornada de jineteada y folclore en el Campo de Doma, donde más de 1.500 personas disfrutaron de un evento que combinó tradición, música y el compromiso de una gestión que apuesta al crecimiento local. La noche estuvo marcada por la presencia de grandes exponentes de la jineteada, entre ellos el subcampeón de Jesús María, Alexis Zabala, quien destacó la calidez del público y el nivel de la organización, expresando su agradecimiento a la localidad y a la Municipalidad por la invitación.
Este encuentro también fue el escenario de un avance significativo para el desarrollo de la infraestructura local con la inauguración del sistema de iluminación del Campo de Doma, una obra impulsada por la gestión municipal que permitirá potenciar los eventos culturales en la región. La intendente Sofía Larraudé resaltó la importancia de esta inversión, destacando que Buena Esperanza sigue creciendo y consolidándose como punto de referencia en la región de Dupuy, no solo por sus tradiciones, sino también por el trabajo sostenido en mejorar la infraestructura y generar oportunidades para la comunidad.
Uno de los ejes fundamentales del evento fue el impulso a la economía local a través del espacio exclusivo destinado a emprendedores, artesanos y productores de la zona, quienes pudieron exhibir y comercializar sus productos ante un público masivo. Esta iniciativa permitió dinamizar la economía regional, brindando oportunidades concretas para quienes trabajan y generan empleo en Buena Esperanza. La gestión municipal ha puesto en valor el papel de estos encuentros como una herramienta para fortalecer el circuito productivo local, promoviendo el comercio y la producción independiente.
El espectáculo contó con la destacada participación de Renacer Chamamecero, Trashumantes, Los del Canto Amigo y la banda Sabor, quienes hicieron vibrar a los asistentes con su música. También se vivió un emotivo momento con la puesta en escena del Pericón Nacional, a cargo de vecinos de la localidad, reafirmando el arraigo cultural y el sentido de identidad de Buena Esperanza.
La jornada fue posible gracias al trabajo articulado entre el equipo municipal, los organizadores y los colaboradores que se esforzaron para que cada detalle estuviera a la altura de un evento de esta magnitud. La nueva iluminación del Campo de Doma, además de garantizar un espectáculo nocturno de primer nivel, representa un paso clave en la consolidación de Buena Esperanza como un polo cultural y económico dentro de la provincia. La intendente Larroude subrayó la importancia de seguir apostando por el crecimiento y la proyección de la localidad, asegurando que estas iniciativas no solo enriquecen la vida de los vecinos, sino que también posicionan a Buena Esperanza como un referente en la región.