Las altas capacidades en la infancia: una realidad poco comprendida

Las altas capacidades en niños y adolescentes siguen siendo un tema desconocido para muchos. Aunque se trata de una condición que se encuentra presente en un 15% de la población con características particulares, los mitos y la falta de atención adecuada pueden generar obstáculos en su desarrollo. Para conocer más sobre esta temática, La Gaceta Digital entrevistó a la Dra. Tamara Portas, miembro de la comisión de Altas Capacidades Argentina, quien detalló las principales características, prejuicios y necesidades de estos niños, así como el trabajo que realiza la asociación en su acompañamiento.

Características de las personas con altas capacidades
Las altas capacidades no se limitan a un alto rendimiento académico, sino que implican una neurodiversidad que requiere acompañamiento para su desarrollo. Según explicó la Dra. Portas, “las altas capacidades son capacidades excepcionales en una o más áreas del desarrollo o funciones cognitivas” y su manifestación depende de factores internos y externos.

Entre las características más frecuentes, mencionó “una gran capacidad para conservar la atención en una tarea de interés, excelente memoria, gran poder de observación y sentido del humor desarrollado desde edades tempranas”. También destacó que algunos niños presentan precocidad, alcanzando hitos del desarrollo antes de lo esperado, como hablar a los seis meses o aprender a leer de manera autodidacta. “Es importante recalcar que no todas las personas con altas capacidades son precoces, pero sí que el 96% o más de los niños precoces tienen altas capacidades”, puntualizó.

Otra característica clave es el hiperfoco, que les permite concentrarse profundamente en un tema de interés, incluso perdiendo la noción del tiempo. Además, suelen ser muy sensibles y empáticos, lo que puede generarles dificultades para procesar emocionalmente la información que comprenden a nivel cognitivo. “Esta disincronía entre su desarrollo cognitivo y emocional es una de las principales dificultades que enfrentan”, agregó la Dra. Portas.

Prejuicios y mitos en torno a las altas capacidades
La falta de conocimiento sobre esta neurodivergencia ha dado lugar a numerosos mitos que pueden afectar el bienestar de quienes la poseen. Uno de los principales prejuicios es la creencia de que las altas capacidades solo están relacionadas con un alto desempeño académico. “Cuando estos niños no son identificados tempranamente y no reciben el acompañamiento adecuado, pueden caer en el fracaso escolar”, explicó Portas, señalando que hasta el 50% de los niños con altas capacidades enfrentan dificultades académicas debido a la falta de estímulo.

Otro mito común es que no necesitan apoyo porque “son tan inteligentes que pueden arreglárselas solos”. Sin embargo, Portas enfatizó que “la alta capacidad es un potencial a desarrollar” y que, sin el estímulo adecuado, pueden aparecer trastornos psicosomáticos como alopecia, alteraciones en el manejo de los esfínteres, alergias y ansiedad. También desmintió la idea de que la alta capacidad se determina solo con un test de coeficiente intelectual (CI), ya que “es imprescindible realizar una evaluación multidimensional del individuo”.

El trabajo de la Asociación de Altas Capacidades Argentina
Desde su creación en 2018, la Asociación de Altas Capacidades Argentina ha trabajado para visibilizar y acompañar a niños y adolescentes con esta condición. “Nació a partir de la reunión de un grupo de padres convocados por la licenciada Laura Diz en 2015”, recordó Portas. Con el tiempo, la organización creció y hoy cuenta con más de 50 voluntarios en todo el país.

Entre sus principales tareas, destacó la capacitación de profesionales de la salud y la educación, la difusión de información actualizada y la orientación a las familias. “Tenemos una comunidad de WhatsApp dividida por provincias, donde nuestros delegados brindan acompañamiento y asesoramiento”, detalló.

A pesar de la falta de formación en altas capacidades en carreras de educación y salud, la asociación busca suplir esta falencia mediante capacitaciones virtuales y gratuitas. “Lamentablemente, las altas capacidades no se abordan en la formación de grado, por lo que nuestro trabajo es fundamental para cerrar esa brecha”, afirmó Portas.

La falta de políticas gubernamentales en altas capacidades
A diferencia de otras neurodivergencias, las altas capacidades no cuentan con una atención específica por parte del Estado. “Actualmente, no hay ningún organismo gubernamental que se dedique exclusivamente a la atención de las altas capacidades”, señaló Portas. Mencionó que Jujuy fue pionera en el tema hace más de 20 años con el programa Alta Inteligencia Jujuy, pero que hoy esa área ha sido disuelta.

En Tucumán, se había creado el EIMAC (Equipo Interdisciplinario Ministerial de Abordaje de Altas Capacidades), pero “este año el ministro de Educación de la provincia disolvió la iniciativa, dejando sin acompañamiento a muchas familias”. Por otro lado, Córdoba cuenta con el único servicio de detección gratuita del país, en la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Córdoba.

Si bien existen leyes que establecen la creación de programas y la identificación gratuita de niños con altas capacidades, estas no se cumplen en la mayoría de las provincias. “Las altas capacidades están contempladas en el artículo 93 de la Ley Nacional de Educación, que indica que las autoridades jurisdiccionales deben crear programas para atender a estos estudiantes. Sin embargo, esto no se implementa”, destacó Tamara.

El camino hacia un diagnóstico correcto
La identificación de las altas capacidades requiere una evaluación integral a cargo de profesionales capacitados. “Pueden realizar estos diagnósticos psicólogos, psicopedagogos, neuropsicólogos y especialistas en atención temprana, siempre que tengan experiencia y estén actualizados en la temática”, explicó Portas.

La evaluación debe considerar todos los aspectos psicosocioemocionales de la persona, ya que una mirada reduccionista puede llevar a diagnósticos erróneos. “Muchas veces se confunden con TDAH, TEA, trastornos del aprendizaje o incluso problemas de conducta”, alertó la especialista, remarcando la importancia de contar con profesionales preparados para diferenciar estas condiciones.

A pesar de los desafíos, el trabajo de organizaciones como Altas Capacidades Argentina ha permitido que más familias accedan a información y apoyo. Sin embargo, la falta de políticas públicas sigue siendo una deuda pendiente en la atención de estos niños y adolescentes.

1er encuentro 2025 de Altas Capacidades
El miércoles 5 de marzo, se realizará el 1° Encuentro Informativo 2025, dirigido especialmente a las familias nuevas, con el objetivo de brindarles toda la información sobre las Altas Capacidades. Este encuentro virtual, que se desarrollará de 19:00 a 20:30 hs a través de la plataforma Zoom, será una oportunidad única para conocer más sobre el tema en un espacio accesible y gratuito. Las inscripciones están abiertas para el público en general, con prioridad para las familias nuevas. Los interesados pueden registrarse a través de este enlace.

En San Luis, si precisás más información sobre este tema, podés comunicarte con el delegado regional de Altas Capacidades Argentinas, Pablo Mascareño, a través del siguiente grupo de WhatsApp.