Este miércoles al mediodía se llevaron a cabo dos audiencias en la ciudad de San Luis. En una de ellas, se resolvió prorrogar por 90 días la prisión domiciliaria de Mariano Mourelle, imputado por atropellar y causar la muerte de Yonathan Valera Salazar, un repartidor de la empresa Pedidos Ya. En la otra, se formularon cargos contra Martín Quevedo, el conductor de una camioneta Volkswagen Amarok que embistió a dos estudiantes de la Escuela Mauricio Pastor Daract, quienes resultaron gravemente heridos.

Caso Salazar: prórroga de prisión domiciliaria para Mourelle
La audiencia fue presidida por la jueza Agustina Dopazo Samper, con la asistencia del secretario del juzgado, Gastón Pascuarelli Di Gennaro. La Fiscalía de Instrucción N° 1 estuvo representada por el fiscal Francisco Assat Alí y el fiscal adjunto Juan Pablo Díaz Estopiñán, mientras que la defensa de Mourelle fue ejercida por Cristóbal Ibáñez y Nedo Gómez.

Durante el debate, la Fiscalía solicitó la extensión de la prisión domiciliaria argumentando la necesidad de completar diligencias pendientes en la investigación, entre ellas, la pericia accidentológica a cargo de la División Delitos Complejos y el análisis del teléfono celular del imputado, secuestrado en un allanamiento. También destacó que el análisis de cámaras de seguridad y testimonios de testigos fueron fundamentales para reconstruir la secuencia de los hechos y determinar la presunta responsabilidad de Mourelle.

Uno de los puntos centrales fue la pericia accidentológica, que aún no ha sido completada. La Fiscalía subrayó que la velocidad a la que circulaba el acusado habría sido un factor determinante en la mecánica del siniestro.

Por su parte, la defensa no se opuso a la prórroga, pero objetó el plazo de 90 días por considerarlo excesivo. Argumentó que Mourelle ha cumplido con todas las órdenes judiciales y que no existen riesgos procesales. En declaraciones a la prensa, Ibáñez sostuvo que su defendido sufrió una “crisis de ausencia”.

Tras escuchar a las partes, la jueza Dopazo Samper concedió la prórroga en los términos solicitados por la Fiscalía, con el objetivo de completar las pruebas pendientes.

El proceso continuará con la incorporación de las pericias restantes, mientras se aguarda la definición de la etapa intermedia del juicio.

El hecho
El siniestro ocurrió el 11 de diciembre, cerca de las 21:00, en la intersección de la avenida Héroes de Malvinas y calle San Juan. Según las primeras averiguaciones, el vehículo conducido por Mourelle impactó contra la bicicleta de Valera Salazar, quien falleció en el lugar. Testigos indicaron que el automóvil habría arrastrado la bicicleta varios metros antes de colisionar con otros vehículos y quedar detenido en la avenida, a la altura de Lamadrid.

Tras el choque, compañeros de la víctima acudieron al lugar y retiraron a Mourelle del vehículo, reteniéndolo hasta la llegada de la policía. El conductor fue trasladado al Hospital del Oeste, mientras la Fiscalía ordenó diversas medidas investigativas, entre ellas la recopilación de testimonios, el análisis de cámaras de seguridad y pericias toxicológicas para determinar si había consumido alcohol o estupefacientes.

Con la prórroga de la prisión domiciliaria, la causa sigue avanzando mientras se aguardan informes periciales y otras pruebas clave que permitan esclarecer la mecánica del hecho y definir eventuales responsabilidades penales.

Adolescentes atropellados en la Illia
En otra audiencia celebrada este miércoles, la jueza de Garantía N° 2, Agustina Dopazo Samper, hizo lugar al pedido de la Fiscalía de Instrucción N° 1 y formalizó la imputación contra Martín Quevedo por lesiones culposas agravadas por la conducción imprudente y la violación de normas de tránsito.

Como medidas de coerción, la jueza ordenó la firma del libro de imputados, la prohibición de salir de la provincia y la inhabilitación cautelar para conducir durante 120 días, mientras continúa la investigación.

El fiscal Francisco Assat explicó que, según la teoría del caso, Quevedo cruzó con el semáforo en rojo en la intersección de la avenida Illia y Mitre, impactando contra Trinidad Escobar, de 18 años, y Valentino Arce, de 17, quienes circulaban en moto. El hecho ocurrió el 5 de marzo a las 20:00.

Por la violencia del impacto, los jóvenes cayeron sobre el asfalto. Escobar golpeó contra un cesto de basura de cemento y su casco salió despedido. Sufrió múltiples fracturas y traumatismos y permanece internada en la unidad de terapia intensiva. Se encuentra estable, hemodinámicamente compensada y sin asistencia respiratoria mecánica desde ayer. Además, responde a órdenes simples y moviliza sus cuatro extremidades.

Arce, en tanto, continúa en la sala de cuidados moderados, estable y a la espera de una cirugía de estabilización de columna.

El fiscal Assat presentó pruebas que incluyen testimonios de testigos, informes policiales y una filmación de una cámara de seguridad privada que captó parte del accidente.

Los abogados defensores de Quevedo, Guillermo Levingston y Guillermo Pena, aceptaron las medidas impuestas, aunque cuestionaron la prohibición de conducir y de salir de San Luis. Argumentaron que su trabajo requiere que maneje y que debe viajar a Mendoza por razones de salud de su madre.

Quevedo se abstuvo de declarar durante la audiencia.

Fuente: Prensa Poder Judicial