En el marco de la presentación de los candidatos del frente “Viva la Libertad, Carajo” para Juana Koslay, David Ocaña, aspirante a diputado por el departamento Pueyrredón, se refirió a la interna que atraviesa al espacio libertario en San Luis. Según expresó, la división electoral, con este frente por un lado y el partido Tercera Posición liderado por Carlos D’Alessandro por el otro, terminó debilitando al sector frente a las elecciones de mayo.
“Lamentablemente para la sociedad de San Luis la oferta electoral libertaria no llegó unificada. La lógica política hubiera dictado que así debiera haber sido, pero no pudo ser”, señaló Ocaña. Relató que la unificación estuvo “muy cerca” de concretarse, ya que se había acordado “prácticamente el ciento por ciento de la distribución de los cargos”, pero que el acuerdo se cayó luego de la nulidad de la alianza La Libertad Avanza. “Hubieron dos posturas. Por un lado, quienes priorizaron sus intereses personales y quisieron asegurar su participación electoral volcándose a una vía partidaria. Nosotros creímos que lo coherente era mantener la alianza”, afirmó.
Respecto a los efectos de esta división, Ocaña advirtió que beneficia “especialmente al oficialismo provincial” y al espacio del exgobernador. “No es lo mismo una Libertad Avanza unificada, que dejara al PJ tercero, a que la Libertad Avanza se divida y el PJ salga segundo. Lamentablemente, los que perdimos, de una manera o de otra, somos el sector libertario”, lamentó. En este sentido, consideró que el quiebre complica la proyección del espacio hacia el 2027, y llamó a los dirigentes a hacer una autocrítica “por no haber estado a la altura de las circunstancias”.
Consultado sobre la posibilidad de una reunificación en el futuro, Ocaña fue escéptico. “Debiera serlo. Me permito dudar de algunas personas, de su actitud, por los intereses que priorizaron”, señaló. Además, cuestionó duramente a D’Alessandro, a quien sin nombrarlo, criticó por no haber renunciado previamente a su banca nacional antes de postularse en San Luis. “Es una actitud de casta, pero el problema más allá de la casta es el sistema, porque es el sistema el que permite que estas cosas pasen”, opinó.
Por último, Ocaña hizo un balance autocrítico de la situación política libertaria en la provincia. “No ha habido un desarrollo político armonioso. Perdón que sea tan crítico con nosotros mismos, pero creo que tenemos la obligación de ser autocríticos por el electorado, porque a mí me parece que es una falta de respeto total y absoluta, de desprecio incluso para todos los que militaron en el 2023, que fueron miles y miles, y se encuentran ahora con que todos los que nos ofrecíamos a hacer un cambio no lo estamos haciendo. Me parece vergonzoso”, comentó el candidato a legislador.
Finalmente, se refirió a la implementación de la boleta única de papel: “Me molesta que lo vendan como una reforma política cuando en realidad es una reforma meramente de un instrumento electoral. No es una reforma política. Decían, vamos a eliminar la lista sábana. Mentira. La lista sábana no se eliminó. Al contrario, lo que se hizo es instrumentar un catálogo de sábanas. Cambiamos la sábana por el catálogo de sábanas. Es decir, vos no vas a poder elegir él sí, él no. O votás todos los concejales juntos o todos los diputados juntos. Y te dieron la opción incluso tramposa de lista completa”.
En cuanto a la presentación de los candidatos para Juana Koslay, Ivana Alcaraz anunció que, en caso de ser electa intendenta, donará su sueldo a una institución, ONG o iglesia. “No estamos por el poder ni por un enriquecimiento”, remarcó. La candidata planteó como ejes principales de su propuesta la seguridad, la baja de la presión impositiva, el trabajo y el orden social. “Queremos llegar a una intendencia que esté acorde a las necesidades de los vecinos”, expresó.
Por su parte, Nicolás Marini, candidato a concejal, destacó que su principal objetivo es que “Juana Koslay vuelva a ser una ciudad verde”, criticando el avance del “hormigón” en el municipio. Cuestionó la falta de planificación urbana y se comprometió a trabajar junto a los vecinos en un plan estratégico participativo para los próximos cuatro años. Tanto Marini como Alcaraz remarcaron que continuarán trabajando en sus actividades privadas y que su incursión en política es “para sumar y no para enriquecerse”.
Alcaraz también planteó su intención de establecer “un municipio de puertas abiertas” y de integrar a los vecinos en la toma de decisiones. “Estamos cansados de que los políticos se crean superiores a la gente. Nosotros queremos que todos seamos una sola cosa”, afirmó.