Un tribunal del Colegio de Jueces de San Luis condenó este jueves a 10 años de prisión a Luis Becerra, encontrado culpable del homicidio simple de Cristian Esquivel, el tatuador de 49 años asesinado a puñaladas en febrero de 2024.
La resolución se conoció durante la audiencia de cesura, instancia en la que las partes presentan sus argumentos y pruebas para que el tribunal defina la pena. En este tipo de audiencias ya no se debate la autoría del hecho —determinada en la etapa anterior—, sino la magnitud de la condena que debe aplicarse.
El fallo también incluyó una medida especial de acompañamiento para el tratamiento de las adicciones del condenado. Para establecer la pena, el tribunal aplicó la Ley 22.278, Régimen Penal de la Minoridad, ya que al momento del crimen Becerra tenía 17 años.
El miércoles, al dictar el veredicto, los jueces Julio Fernando de Viana, José Luis Flores y Adriana Lucero Alfonso habían declarado a Becerra responsable del delito de homicidio simple y absolvieron a su hermano Omar por el beneficio de la duda, ordenando su inmediata libertad.
El crimen ocurrió la madrugada del 22 de febrero de 2024, en la calle Riobamba al 900, a pocos metros de la casa de Esquivel. La víctima recibió siete puñaladas y, gravemente herido, caminó hasta una estación de servicio en Héroes de Malvinas al 500, desde donde llamaron a una ambulancia. Horas más tarde falleció en el Hospital Ramón Carrillo mientras era intervenido quirúrgicamente.
