Según contó un empleado de La Tienda, en una parte del local que antes era un garage hay una boca de cloaca, de la cual comenzaron a salir los efluentes en la mañana de ayer, cubriendo gran parte del comercio. En la armería la situación fue prácticamente la misma, con toda la parte de atención al pública cubierta de efluentes.
Según explicó el director de SerBa, César Cabrera, los taponamientos que produjeron este colapso se debieron a la presencia de grasa y también de prendas íntimas en la red cloacal. “La grasa se debe a que en la zona tenemos muchos restaurantes, muchos de los cuales no tienen cámara desengrasante”, dijo Cabrera, comentando que se comenzará a inspeccionar la presencia de estas cámaras para “tratar de eliminar o amortiguar el inconveniente de la cloaca en ese sector”.
El funcionario también comentó que antes no se exigía cámara desengrasante, por lo que puede haber locales que todavía no los tienen. “Ahora nosotros exigimos que tengan cámara desengrasante”, dijo Cabrera, quien luego contó que se utilizaron cañas con “unos resortes especiales” en la punta para poder sacar las prendas íntimas atoradas, ya que con el camión de SerBa no lo podían hacer.
En cuanto al origen de estas prendas, sin precisar si eran masculinas o femeninas, Cabrera simplemente dijo que pueden haber venido de cualquiera de los departamentos o comercios que hay en la zona.