El monóxido de carbono es un gas tóxico sin olor, ni color, que puede matar. Las fuentes que lo producen son el mal funcionamiento de las estufas, calefones, termotanques a gas, hornallas, braseros, salamandras, incendios y obstrucción de los escapes de autos, entre otros.
¿Qué podemos hacer para evitar la intoxicación?
Estas intoxicaciones, que pueden causar la muerte, son absolutamente prevenibles. Esta es una serie de recomendaciones para minimizar el riesgo de intoxicaciones por monóxido de carbono:
– Las instalaciones de artefactos a gas deben ser realizadas siempre por un gasista matriculado.
– Los artefactos a gas deben ser controlados cada año al inicio de la época invernal.
– Prestar atención a que la llama sea siempre azul. Si es naranja o roja, el artefacto funciona mal y libera monóxido de carbono.
– Dejar siempre una ventana un poco abierta cuando un artefacto a gas está funcionando.
– No usar hornallas o el horno para calefaccionar ambientes.
– No dormir con braseros ni con otros artefactos a carbón encendidos.
– No instalar calefones a gas en el baño.
Los síntomas de intoxicación por estar expuesto al monóxido de carbono son variados:
– Dolor de cabeza
– Somnolencia
– Nauseas y vómitos
– Impotencia muscular
– Cefaleas
– Mareos y debilidad
– Inestabilidad y confusión
– Visión borrosa
– Dolor de pecho, convulsiones y desmayo.
Ante cualquiera de estos síntomas, se recomienda llamar al 911 o asistí al centro de salud más cercano.
Números útiles:
– #107 Sempro
– #911 Bomberos de la Policía provincial
– #100 BomberosVoluntarios
Si tenés un reclamo sobre el servicio de Energía San Luis, podés comunicarte al 0800-999-1080