Además, los puestos se designarán mediante una “comisión de artesanos”.

Ayer, Francisco Petrino, subsecretario de Gestión Pública, dio a conocer que, a pedido del intendente Enrique Ponce, y a pesar de que la ordenanza vigente posee una definición de “artesanía” muy flexible, los artesanos que deseen trabajar en uno de los 56 puestos que tiene el nuevo Paseo del Padre, deberán añadir “un valor agregado manual o artesanal a algún producto”. “Es decir, no se aceptarán los revendedores que no presenten ningún producto original”, afirmaron desde el municipio.

Los requisitos para postular a una de las preadjudicaciones son los mismos que para cualquier habilitación comercial: inscripción ante la AFIP, matafuegos, desinfección, certificado de buena conducta. Luego, los puestos de ventas del Paseo del Padre, donde se emplazarán los artesanos, serán asignados por una “comisión de artesanos”, según lo prevé la ordenanza vigente.

Además, desde el municipio destacaron que estará terminantemente prohibida la invasión de cualquier otro espacio público que no sean los módulos de madera confeccionados por la Municipalidad.