Este jueves, Fernanda García Segovia, secretaria Adjunta del Sijupu, contó que ayer, martes 27 de julio, se llevó la audiencia conciliatoria, en el marco de la demanda contencioso administrativa que el sindicato inició en contra del Superior Tribunal por la modificación unilateral que realizó del horario de trabajo.
Cabe recordar que el horario tradicional de los empleados judiciales fue de 7 a 13 para el personal de atención al público y de 6 a 13 para maestranza. Durante la pandemia, el horario de los judiciales se cambió momentáneamente de 8 a 13. Al finalizar la crisis sanitaria, en vez de volver al horario habitual de 7 a 13, la nueva composición del STJ fijó un horario de 8 a 14 horas.
Luego de varias protestas, el reclamo se convirtió en una demanda en contra del STJ y ayer se realizó la primera audiencia de conciliación y medidas de prueba. “Conciliación no hubo, así que se tuvieron presente todas las pruebas que hemos representado con respecto al cambio de horario”. En ese sentido, García Segovia señaló que el cambio no solo afecta a empleados judiciales, sino también “a la misma sociedad”. “Muchos podían venir a las 7, porque entraban a trabajar a las 8, y podían hacer trámites en los juzgados bien temprano. No tenían que pedir permiso en sus lugares de trabajo porque podían hacer todo a primera hora”, agregó la empleada judicial.
Como no hubo acuerdo, la demanda continuará su curso y el próximo paso será audiencia testimonial que se realizará el próximo 20 de septiembre. “Teníamos todo organizado, especialmente los que tienen hijos. Nos perjudica a todos, tanto a la sociedad como al empleado”, concluyó la secretaria Adjunta del Sijupu.