Este jueves, la jueza de Garantía Nº 2 de la Primera Circunscripción, Agustina Dopazo Samper dio por formulados los cargos contra Diego Cruceño por el delito de homicidio culposo agravado por conducción de vehículo, con acceso a alcohol en sangre y resistencia a la autoridad, e hizo lugar al pedido de la Defensa y ordenó la prisión domiciliaria por un plazo de 90 días.
La defensa técnica de Cruceño, estuvo representada por los abogados, Martín Di Franco y Héctor Andina. Se solicitó el arresto domiciliario argumentando que su defendido nunca se fugó del control policial, por lo que no existe riesgo de fuga. Además, se pidió tener en cuenta su condición económica y el arraigo con la ciudad de Quines. Asimismo, peticionó a la magistrada no hacer lugar al pedido de la fiscalía de prisión preventiva, sino domiciliaria en una vivienda ubicada en la ciudad de San Luis.
En la audiencia del lunes, la fiscal adjunta Roxana Alcaráz en su alocución mencionó evidencias incorporadas al legajo y solicitó formular cargos por homicidio culposo agravado por la conducción de un vehículo con exceso de alcohol en sangre y fuga en concurso real con resistencia a la autoridad en accidente de tránsito, por lo que pidió una prisión preventiva en el Servicio Penitenciario Provincial por 120 días.
Finalmente, la magistrada tuvo por admitido el pedido de prisión domiciliaria solicitado por la Defensa en relación a los argumentos vertidos, y teniendo en cuenta las evidencias colectadas por fiscalía hasta el momento, le formuló cargos por 90 días por Homicidio Culposo agravado por conducción de vehículo, con acceso a alcohol en sangre, y resistencia a la autoridad configurados en el art. 84 bis, último párrafo y art. 239 del Código Penal.
El hecho
Según lo relatado por la fiscal adjunta Roxana Alcaraz en la madrugada del 14 de diciembre, alrededor de las 5:50, en la localidad de Quines, mediante un operativo de control de alcoholemia realizado por la Policía sobre la Ruta 20, en el kilómetro 266, frenan a un conductor de un Volkswagen, acompañado por otra persona. Al conductor le solicitan realizarse un control de alcoholemia del que es reticente, aunque finalmente arrojó que tenía 1,11 g/l de alcohol en sangre. Al ser informado de la retención de su vehículo, Cruceño reaccionó retirándose del lugar con gritos a los oficiales.
Momentos después, en una curva de una calle Sin Nombre, cerca de una vivienda, el imputado colisionó contra una motocicleta Motomel conducida por una mujer, quien salió despedida a más de 20 metros de distancia debido al impacto. Según testigos presenciales, el conductor abandonó el automóvil en el lugar y dejó a la víctima tendida inconsciente sobre el suelo.
Al llegar, la ambulancia traslada a la víctima al nosocomio de Quines, donde fue atendida por la Dra. Miriam Pérez, quien dio cuenta que su paciente padecía pérdida de conocimiento y múltiples lesiones sobre su cuerpo, en virtud de la gravedad, es derivada con acompañamiento médico al Hospital Ramón Carrillo de la ciudad capital, donde horas más tarde se produce su deceso.
Fuente: Prensa Poder Judicial