El año pasado se incorporaron 230. Tras seis meses de capacitación en las compañías, 97 beneficiarios del Plan de Inclusión Social están en la etapa final de incorporación a firmas de distintos rubros del sector privado. Además, otros 334 iniciarán pronto las capacitaciones y se sumarán a los 607 que ya atraviesan esa fase.
“El proceso comienza con la rúbrica de un acuerdo con las compañías que deben encargarse de preparar a los beneficiarios según las aptitudes que necesitan para los puestos vacantes. De este modo, se logra la especialización en lo que demandan”, explicó el ministro de Salud, Gastón Hissa, a cargo de la cartera de Inclusión Social, de forma interina.
El año pasado fueron 230 los beneficiarios incorporados al sector privado.
Por su parte, el jefe del Programa Cultura del Trabajo e Inserción Laboral, Fernando Ofría, acotó que “el compromiso implica, asimismo, que del total de personas que emprenden el período de formación en cada empresa, el 50% debe ser incorporado en forma efectiva a la planta de trabajadores. El plazo máximo de capacitación puede extenderse por dos trimestres”.
Respecto de la fase de formación, el jefe del Subprograma Generación de Empleo, Luis Perugini, agregó que “además de cobrar el beneficio y contar con ART y la obra social que se asigna a cada integrante del Plan, las firmas otorgan un plus salarial que suele ser de $2 mil a $5 mil. Se trata de un incentivo que asignan para que la propuesta sea atractiva para el futuro empleado. Igualmente, explicó que para asegurar el éxito del proceso, el área de Recursos Humanos del Plan se encarga de ubicar a los perfiles que mejor se adapten a la demanda empresarial”.
Cooperativas, otra alternativa laboral
Gastón Hissa resaltó que “desde el Programa Cultura del Trabajo e Inserción Laboral también se acompaña a los beneficiarios para la conformación de cooperativas. Se trabaja fuertemente en la formación previa, incluso antes de que decidan asociarse, porque el objetivo es que cada vez tengan mayor grado de profesionalismo. Se los acompaña desde el nacimiento de la cooperativa y en su evolución; es decir, se hace un seguimiento cuando ya prestan servicios tanto en el Estado como en el sector privado”.
Actualmente, hay 118 cooperativas en actividad, que dan empleo a 1.225 personas. Acerca de la formación que reciben, Ofría aclaró que asisten a varios encuentros y manifestó que primero trabajan el concepto general de ese tipo de sociedad y su régimen administrativo. Esto implica la tramitación legal y los tipos de contratación, la definición de la comisión directiva y las pautas de trabajo.