Tenían 27 y 29 años de edad y eran oriundos de Córdoba.

Al mediodía de ayer, dos repartidores de bebidas, oriundos de Villa Dolores y Villa Sarmiento (Córdoba), murieron electrocutados en Santa Rosa del Conlara. Las víctimas fueron identificadas como Matías Ezequiel Altamirano, de 27 años de edad, y Héctor Oscar Nievas, de 29. Los jóvenes trabajaban para la empresa Giberaldo de Villa Dolores, dedicada al reparto de gaseosas, jugos, bebidas alcohólicas. Viajaban en un camión con el logo de la marca Quilmes.

Según informó Relaciones Policiales, el fatal accidente ocurrió “en ocasión en que ambos se disponían a trasponer una tranquera o portón de caño metálico que separa la puerta de ingreso de un restaurant situado a la vera de la Autopista Provincial Nº 55 y la Ruta Provincial Nº 5. El caño de dicho portón estaba electrificado, ya que al mismo había sido atado un cable con electricidad que llevaba corriente a dos tubos fluorescentes y que dan luz al frente del negocio, a través de un cartel. Las lluvias registradas anoche habrían humedecido el caño metálico facilitando su electrificación”, informó la Policía.

El causal del deceso fue establecido como “muerte por electrocución – paro cardiorrespiratorio” y los cuerpos ya fueron entregados a sus familiares.

Finalmente, cabe destacar que estos dos jóvenes son la 4ta y 5ta víctimas fatales por electrocución en lo que va del año. En enero, un nene de 8 años murió en el barrio Francisco Cáceres. Un mes después, un adolescente de 16 años murió en el barrio Eva Perón, mientras hacía un arreglo en el baño de la casa de su tío. Finalmente, el pasado viernes en Concarán, un auxiliar de policía, de 23 años de edad, murió tras sufrir una descarga eléctrica mientras manipulaba la máquina cortadora.