Controles vehiculares se realizan en distintos horarios y zonas. También habrá controles de alcoholemia. 
A los habituales controles semanales se sumarán ahora una serie de operativos sorpresa en los que participarán las direcciones de Transporte, Bromatología y Tránsito. La iniciativa se llevará adelante además en diferentes barrios con el objetivo de verificar las condiciones en las que circulan taxis, vehículos que transportan alimentos y coches particulares. También se realizarán controles de alcoholemia.
Este tipo de controles tuvo su primera experiencia el jueves de la semana pasada con un saldo de 50 infracciones labradas. El operativo se realizó en diferentes puntos de la ciudad donde se montaron puestos con inspectores a lo largo de doce horas. Licencias de conducir vencidas, vehículos sin luces ni paragolpes, propietarios de taxis que no registraron a sus conductores o motos que generaban ruidos molestos fueron las contravenciones más comunes.
“Levantamos muchas multas contrariamente a lo que queríamos nosotros. En conjunto, labramos 50 infracciones, y las más recurrentes fueron de propietarios de taxis que no anotan a sus choferes, o tienen vencido el seguro, o tienen las cubiertas lisas. Bromatología levantó multas a vehículos que no tenían habilitación para transportar mercadería. También hubo casos de choferes que no tenían carné o vehículos sin luces”, explicó Jorge Jofré, director de Transporte.
“Estamos organizando un operativo bastante importante por la noche. Sabemos que las infracciones mayores se comenten en horarios nocturnos, porque se supone que no hay ningún tipo de control. Nosotros vamos a demostrar que el control es permanente. Esto no es una caza de brujas, simplemente queremos que los vehículos que circulen dentro del ejido municipal estén en condiciones”, manifestó el funcionario.
