“Lo que nos pagan es como si fuéramos prácticamente esclavos”, dijo Roberto Álvarez, quien trabajaba en la panadería El Sol.

Ayer, Roberto Álvarez, acompañado por miembros de UTHGRA, se manifestó frente a la panadería El Sol, ya que afirma haber sido despedido un día después de haber sido electo, por sus compañeros de trabajo, delegado sindical. 

“El miércoles me eligieron delegado sindical del Sindicato de Gastronómicos en la panadería El Sol. El jueves, me presento a trabajar en mi horario y, cuando estoy saliendo a las 10 de la noche, me informa mi patrón que estaba despedido, que no me presentara a trabajar el día siguiente”, relató Álvarez, asegurando que no le dieron explicación alguna sobre su despido.

Según Álvarez, él fue el primer delegado sindical en la historia de la panadería. “Los otros empleados están bajo presión. Si ellos hablan, los echan. Con el trabajo que hacemos, lo que nos pagan es como si fuéramos prácticamente esclavos”, manifestó el panadero.

Álvarez contó que él es maestro panadero, con más de 20 años de experiencia y varios trabajando para El Sol. Según la escala salarial que maneja el gremio, él debería estar cobrando alrededor de 10 mil pesos, pero su sueldo era tan solo de $2.100.

“Estoy esperando que me llegue el telegrama para ver cómo solucionar legalmente este asunto. Lo que uno reclama es para vivir dignamente con su familia”, concluyó Álvarez.