Al finalizar sus anuncios económicos de ayer, ya en un estado que él mismo definió como “verborrágico”, el gobernador dijo que están estudiando “algunos dolores que tienen” los “hermanos de la Salud”, y agregó que “igual a los docentes”. Pero la realidad es que los anuncios destinados a estos sectores brillaron por su ausencia, como suele ser habitual. Los médicos y los docentes tienen múltiples reclamos, los hacen visibles, pero nunca consiguen más que el mismo aumento que recibe el grueso de la Administración Pública.
“Terminamos dolidos con estos mensajes, porque nos sentimos fuera de la agenda. Creemos que el gobernador sabe perfectamente lo que nos pasa en Salud porque se lo venimos repitiendo hace 13 años. Ha tenido mucho tiempo para enterarse cuál es la deuda con ‘los hermanos de la salud’ y cada vez que se pierde una elección él vende ilusiones y regala dinero que es nuestro, porque no es el suyo. Me quedé con mucha rabia con todo lo que dijo. Esperaba mucho más de él. Yo no quiero que me pida perdón, quiero que sepa lo que pasa en la provincia que gobiernan hace 40 años. No puedo creer que un gobernante de hace 40 años no sepa lo que pasa en su provincia y que después de que pierde una elección pida perdón. Realmente nos ofende a los trabajadores de la Salud esta situación”, fue lo primero que dijo Ana Lía Trifiró, secretaria general de la Asociación de Profesionales y Técnicos de la Salud (APTS), en diálogo con La Gaceta Digital.
En cuanto a los reclamos del sector, Trifiró recordó que se jubilan como empleados administrativos, que son contratados cada 3 meses en vez de pertenecer a la planta permanente del Gobierno, que hoy están contratando a monotributistas, y que dependen “del humor del jefe que nos ha puesto para que nos vigile para ver si podemos pedir un día de franco o que nos dejen salir una hora antes para hacer un trámite”.
“Entonces no le permito, no le permitimos que diga ‘perdónenme’. El tiene que rendir cuentas, para eso es elegido gobernador”, concluyó Trifiró, quien además recalcó que “se han abierto todas las actividades, como si el virus no existiera”.