“Le pregunto a los jueces y quiero que me contesten por qué a mi hijo Mario lo condenaron por dichos y por qué el que mató a Gabriel nunca estuvo detenido”, dijo Ada Agüero.
El pasado miércoles por la mañana, Ada Agüero reclamó ante el Poder Judicial por sus dos hijos: Mario Flores, que está preso hace tres años por un homicidio que, según ella, no cometió; y Gabriel Flores, quien murió atropellado murió el pasado 1ro de marzo, tras estar ocho días en terapia intensiva debido a las heridas que sufrió cuando, a bordo de su motocicleta, fue embestido por un Renault 18 manejado por una persona que estaría identificada como Fernando Flores, pero que todavía no ha sido detenido.
“Le pregunto a los jueces y quiero que me contesten por qué a mi hijo Mario lo condenaron por dichos y por qué el que mató a Gabriel nunca estuvo detenido. ¿Por qué tiene hermanos que son policía? No quiero que el caso de Gabriel quede en la nada”, pidió Ada, quien acompañada por amigos y familiares cortó la calle Rivadavia frente al Poder Judicial.
“Cuando lo encuentro a mi hijito tirado en un charco de sangre, esa persona estaba como a una cuadra, pero jamás se volvió a ver a quién agarró, a quien mató”, dijo en relación a Fernando Flores, quien sería, según lo que le dijo la Policía, la persona que atropelló su hijo Gabriel.
Finalmente, pidió justicia por Mario, quien fue condenado a 10 años de prisión por ser partícipe en el asesinato del carnicero Miguel Ángel Baigorria. Según Ada, su hijo fue condenado sin pruebas y “solo por dichos”, mientras el verdadero autor, un mendocino llamado Hugo Carmón, sigue suelto.