Durante la manifestación se vio un fuertísimo repudio a las palabras de la fiscal Fernández de Vargas.
Ayer, de 18 a 20 horas, el centro puntano fue el escenario de una nueva marcha que convocó a alrededor de 200 personas que manifestaron su apoyo a Romina García Hermelo, la docente de Literatura que fue sancionada por el Ministerio de Educación sin defensa previa, luego de dar un libro que trata un romance lésbico. Nuevamente, fueron jóvenes de distintas agrupaciones culturales y grupos LBGT de la provincia quienes acompañaron a Romina, pero también se sumaron padres de alumnos y gremialistas docentes, como María Inés Quattropani.
Además del reclamo por la implementación en la provincia de la ley nacional de Educación Sexual Integral, la marcha de ayer significó un fuertísimo repudio a las palabras de la fiscal N° 2, Sonia Fernández de Vargas, quien consideró que el texto elegido por la docente “es una apología de alabanza a la corrupción de menores”, entre otras cosas.
“Repudiamos enérgicamente la sentencia homofóbica y lesbofóbica de la fiscal Sonia Fernández de Vargas, que claramente no genera un diálogo ni mucho menos un pensamiento crítico a la hora de entender la situación”, comentó Romina durante la marcha, agregando que todavía no se la llamado oficialmente a prestar declaración informativa.
“Podría acudir a declarar sin la notificación formal porque yo no cometí ningún crimen, yo no corrompo menores, yo no tengo nada que ocultar. Claramente estoy disponible para la Justicia. Me parecen terribles las acusaciones que se han hecho. Hoy soy yo, pero esto no le tiene que volver a pasar a ningún trabajador”, concluyó Romina.
