Integrantes de la Unión de Trabajadores de la Educación San Luis (UTEP) plantearon en una reunión al ministro de Educación, Andrés Dermechkoff, que se deben realizar más llamados para cubrir cientos de horas y decenas de cargos docentes que están vacantes. En lo que va del año se realizaron cuatro llamados que no cubren las vacantes que tiene el sistema.

“Venimos siguiendo la cantidad de cargos vacantes y nos encontramos con que en todas las escuelas nos siguen faltando docentes y horas a cubrir”, aseveró la secretaria general de UTEP, Soledad Correa.

La gremialista ejemplificó la cantidad de horas cátedra vacantes en escuelas sin dar el nombre de los establecimientos en cuestión. En solamente cinco escuelas son 324 las horas (en una sola hay 129 horas vacantes) vacantes y Educación llamó a concurso para 59 horas. En otros establecimientos son 88 los cargos vacantes, según la secretaria.

La gran cantidad de cargos y horas vacantes surgieron porque el año pasado no se hicieron llamados para cubrirlos debido al cierre de las escuelas por las medidas de prevención contra la pandemia. A lo mencionado se acumulan los que deben cubrir las escuelas este año de acuerdo a la explicación de Correa.

La Gaceta preguntó cuál es el total de horas y cargos vacantes que se deben cubrir en la provincia. “Faltan un montón. En todos los relevamientos que hemos hecho faltan la cobertura de cargos y horas cátedra”, respondió.

El pasado viernes, UTEP se reunió con el ministro de Educación, Andrés Dermechkoff, y su equipo técnico. “No supieron darnos la cantidad de horas vacantes. Le decimos al ministro que en todas las escuelas estamos recorriendo y en todas nos falta”, señaló Correa.

El jueves 8 de abril, un día antes de la reunión mencionada, UTEP envió al Ministerio de Educación una carta documento en la que se solicitó la continuidad de los llamados a concursos.

“Necesitamos los docentes para que puedan educar a nuestros niños. En plena crisis de pandemia lo que necesitamos es que estén todos los cargos cubiertos para poder controlar el cumplimiento de los protocolos. Necesitamos inversión del Gobierno provincial. Los directivos no pueden más sin docentes. En este contexto, la presencialidad termina siendo realmente una mentira”, concluyó Correa.