Se la acusa por malversación de fondos durante su gestión como intendenta de Villa Mercedes.
Anoche, el juez de Instrucción Penal Nº 1, Alfredo Cuello, pidió a la Cámara de Diputados provincial el desafuero de la ex intendente de Villa Mercedes y actual diputada, Blanca Pereyra, quien está acusada de haber gastado más de 2 millones de pesos que estaban destinados al pago de horas extras a los empleados que realizaron obras de refacción en el edificio de la Municipalidad de la ya mencionada ciudad. Al parecer, las horas extras nunca se pagaron y las obras brillaron por su ausencia.
Además de Pereyra, se ha llamado a indagatoria a tres funcionarios de su gestión, el ex secretario de Gobierno, Rodolfo Luque, el ex secretario de Hacienda, Marcelo Fabián Zeballos, y el titular de Control y Legalidad, Sybil Blanco. La ex intendente y sus funcionarios están siendo investigados por malversación de fondos, adulteración de documentos públicos e incumplimiento de deberes de funcionario público.
“Las cuentas de inversión fueron aprobadas por unanimidad, hasta por lo miembros de la oposición y también fueron aprobados todos los balances y ejecuciones presupuestarias en el Concejo Deliberante. No puedo decir nada. Una vez que me llegue la notificación, vamos a ver de que se trata y ejerceré mi derecho a defensa”, fue lo único que Blanca Pereyra, en un fugaz encuentro con la prensa, declaró ayer ante la prensa.
“Va a ser tomado con la seriedad institucional que merece un pronunciamiento de la Justicia. No conozco los términos, no conozco la motivación, no conozco los cargos”, dijo el desmemoriado diputado Gonzalo Estrada, quien, sin embargo, si conocía y recordaba “un tribunal de contralor que, unánimemente, aprobó las cuentas de Villa Mercedes”.
