A las ratas, hay que sumarle la oscuridad de los pasillos del lugar. “Como verás, no hay luz en los pasillos, es todo oscuridad. El tema de la luz es muy complicado. Llegan muchas encomiendas y acá, a las 6 de la mañana, no ves mucho”, contó Claudia, en declaraciones a Siempre FM.
Otro de los problemas para los que trabajan en el subsuelo es que los baños están habitualmente cerrados, por los que hay que utilizar los de la planta baja. “Si querés ir al baño, tenés que cerrar tu negocio e ir a los pisos de arriba. El tema es que son un par de minutos que te alejás de tu sector y no sabés qué puede llegar a pasar. El otro día estaban los baños cerrados, tuvimos que subir y cuando vinimos nos habían querido forcejear la puerta. También es un poco peligroso acá abajo”, contó Claudia.
“El destacamento policial no camina por acá, no andan por el subsuelo”, destacó Muñoz, quien contó que, aprovechándose de eso, delincuentes le robaron el celular a uno de sus empleados un domingo, ya que su local es el único que abre ese día. “Antes teníamos una seguridad, pero hoy en día ya no está”, concluyó, antes de comentar que se han elevado quejas, pero que la responsable de la estación, la ex ministra María Celia Sánchez, no ha dado señales de haberlas recibido ni demostrado interés en interiorizarse sobre los problemas que aquejan a la gente que trabaja en el subsuelo.