El primero de los acuertelamientos ocurrió en Villa Mercedes, alrededor del mediodía en la Unidad Regional II, para luego extenderse a la Unidad Regional III de Concarán, en horas de la tarde. Luego se fueron sumando Merlo, Tilisarao y la Capital, donde la gente se empezó a concentrar a partir de las 22 horas. En total, serían unas 300 personas las que se habrían manifestado, a nivel provincial, el día de ayer.

Mientras todo esto ocurría, el ministro de Relaciones Institucionales y Seguridad, Martín Olivero, realizaba declaraciones en el programa de Alberto Trombetta, asegurando que a los auxiliares de policía que se hayan acuartelado se les rescindirá sus contratos, mientras que los efectivos serán sumariados.

Por su parte, el jefe de Policía, Miguel Ángel Ubieta, tras su reunión con los efectivos acuartelados en Villa Mercedes, manifestó lo siguiente: “Ellos dijeron que no a nuestra propuesta de iniciar el dialogo por eso se instruyó al fiscal de Estado para que haga la denuncia ante la justicia”.

Por otro lado, cabe destacar que ayer al mediodía, en declaraciones realizadas a los medios de la ciudad, el mismo Ubieta aseguraba que estaba “todo normal” y que “todas las unidades se encontraban sin ningún inconveniente”. El jefe de Policía llegó inclusive a afirmar que el petitorio del oficial Miguel Ángel López, quien encabezó el reclamo en Mercedes, no tenía “representatividad hacia el resto de la institución”.

“Todo surge a raíz de una presentación que ha hecho ayer en el Gobierno un oficial López, firmado por él y la esposa, donde presenta una serie de ítems que reclama, pero no hay representatividad de él hacia el resto de la institución. Están poniendo en tela de juicio la seguridad de la provincia. Eso es grave y también vamos a evaluar como él es responsable. Vamos a evaluar el comportamiento porque creemos que no es el adecuado. Hay reglamentaciones que deben respetarse, hay metodologías que deben respetarse”, amenazaba ayer Ubieta, mientras trataba de transmitir la sensación que se estaba “trabajando en toda la Policía de manera normal”.

“A nivel cuyo estamos muy atrasados. Yo con 23 años de servicio no llego a fin de mes. Para ciertas cosas nos tratan de empleados públicos y para otras de funcionario policial. El médico no es un empleado público, es un médico. Tenemos que darle a la Policía categoría como corresponde. Lo que queremos es que al menos se nos escuche”, nos dijo Daniel, un inspector que concurrió a la manifestación de ayer, quien luego repasó los principales puntos del petitorio policial, como ser un básico de 7 mil pesos, una diferenciación de las horas adicionales, limitación de la jornada laboral a no más de 48 horas semanales, provisión semestral de uniformes y demás indumentaria, y la creación de un complejo habitacional para las familias del personal policial, entre otros reclamos que podrá ver en esta nota.