La Municipalidad lo dispuso por una serie de irregularidades que presenta la obra y que todavía no se revierten. Enrique Picco, secretario de Vivienda y Desarrollo Urbano, explicó que se dispuso paralizar la obra del edificio llevada a cabo por el fideicomiso de GEPU por persistir una serie de irregularidades que desde la Municipalidad se habían pedido revertir.
“El proyecto presentado tenía varias irregularidades. Por ejemplo, los planos de mensura no se correspondían con el edificio propuesto. Tampoco cumplía con los requisitos que establece el Código de Edificación Municipal en cuanto a los aspectos técnicos. Bajo estas circunstancias es que el fideicomiso solicita a la Municipalidad una flexibilización. Ahora llevan un mes tratando de recolectar la información y ajustándose para cumplir con lo que les hemos solicitado”, señaló Picco.
Por lo tanto, la obra seguirá paralizada hasta tanto los encargados de la construcción se adecuen a la flexibilización pedida y otorgada por el Comuna.
El funcionario agregó que “como la obra es irregular, la Municipalidad ha librado actas cuando comenzó la excavación, obligando a la empresa a realizar un tapado de la obra. Para la Municipalidad, la obra no tiene ningún tipo de factibilidad de construcción. Ahora esperaremos para ver si pueden cumplir con lo que les exigimos a través de la flexibilización”.
Como consecuencia de esta obra ilegal, el movimiento de suelo realizado por la empresa socavó los cimientos de una medianera colindante, por lo que el vecino la tiró abajo para evitar que un derrumbe intempestivo pueda dañar a alguien.
El complejo habitacional está proyectado con dos niveles de subsuelo, una planta baja prevista para locales comerciales. La torre se completa con otros seis pisos pensados para departamentos.