Este lunes a las 10 horas comenzó el juicio que lleva adelante la Cámara de Apelaciones en lo Penal, Correccional y Contravencional N° 2 de la ciudad de San Luis en contra de Carina Di Marco, la mamá de Florencia Di Marco, la niña de 12 años que fue violada y luego asesinada por su padrastro, Lucas Gómez.
Di Marco, de 36 años de edad, está acusada de ser partícipe necesaria en el delito de “abuso Sexual con acceso carnal agravado por el vínculo por ser guardador y por el aprovechamiento de convivencia preexistente” cometido por su pareja, Lucas Gómez.
Por este hecho, el fiscal de Instrucción Esteban Roche solicitó una pena de 17 años y 6 meses de prisión. Tanto para el funcionario del Ministerio Público como para la jueza que investigó el caso, Virginia Palacios, Di Marco sabía que su pareja abusaba de la niña de 12 años desde hacía tiempo y no hizo nada para detener esa situación.
Florencia fue encontrada muerta debajo de un puente en las afueras de la localidad Saladillo, en marzo de 2017. Luego del hallazgo del cuerpo, que presentaba signos de violación y estrangulamiento de acuerdo a los informes forenses, la justicia le dictó la prisión preventiva a Gómez como principal sospechoso del hecho. Fue alojado en el penal de Pampa de las Salinas, donde se suicidó dos días después de que le tomaran muestras de ADN, en el mes de mayo de 2017. El primero de junio se conoció que las muestras de ADN confirmaron en un 99,9% que Gómez había violado a Florencia.
Por este motivo, Carina Di Marco enfrenta sola el proceso ante el tribunal conformado por Hugo Guillermo Saá Petrino (presidente), Fernando Julio De Viana y Gustavo Adolfo Miranda Folch (vocales). Como fiscal de Cámara interviene Fernando Rodríguez.
Los pedidos de la defensa
La jornada del juicio oral y público se lleva adelante en la sala de Debate Oral Nº 2, ubicada en el segundo piso de Tribunales, se inició con la lectura del requerimiento de elevación a juicio contra Di Marco, y luego el tribunal dio por abierto formalmente el debate. Esto dio paso al planteo de las llamadas cuestiones preliminares, previas al inicio de la ronda de declaraciones indagatorias.
En este punto, la abogada defensora, Karina Mantelli, solicitó desestimar el testimonio de 70 testigos, a los fines de darle celeridad procesal a la causa, ya que los mismos hacían referencia al delito de homicidio que pesaba en contra de Gómez.
La abogada defensora también pidió la nulidad del auto de procesamiento y la acusación fiscal ya que, según consideró la profesional, se violaron los principios de congruencia y de legalidad. “Los delitos de omisión deben estar debidamente consignados y en este caso no lo están. Así planteado, a mi defendida la acusan de los abusos directamente. Para evitar sentencias arbitrarias pido las dos nulidades”, dijo Mantelli.
El tribunal, previo tomarse un cuarto intermedio para analizar ambas solicitudes, resolvió hacer lugar al desistimiento de testigos, pero en relación al pedido de declarar la nulidad del procesamiento y la acusación fiscal, decidió diferir su resolución para el momento de la sentencia.
La declaración de Di Marco
Luego de expresarse ante los dos pedidos de la defensa, el tribunal llamó a declarar a Di Marco. La mujer habló de su relación con Gómez, que lo conoció cuando Florencia tenía dos años y medio, que consumía alcohol y drogas y que transitó los meses culmines de su último embarazo sola, ya que su pareja decía que no era de él.
Además, negó que alguien le haya comentado que su hija sufría abusos, asegurando que si lo hubiese sabido, no tendría a su hija “en un cajón”. “Nadie me comentó nada ni noté ningún comportamiento extraño de parte de ella. Flor nunca me dijo nada que me preocupara. Una madre no hace eso. Como miente la gente, que Dios los perdone”, sostuvo Di Marco.
El juicio continuará el día de mañana, a las 9 horas.