Esta mañana, el Frente Gremial Docente dio una conferencia de prensa en la que prometió “luchar incansablemente” para lograr que este año finalmente haya paritarias en la provincia de San Luis. Además, se exigirá que se ejecute la cláusula gatillo que el gobernador, Alberto Rodríguez Saá, prometió en 2019 y nunca otorgó.
La conferencia comenzó con Juan Accornero, secretario general de Sadop, dando detalles de la paritaria nacional, en la que el Gobierno Nacional realizó la propuesta de llevar el salario mínimo a $23.000 en marzo y $25.000 para julio. “Establece un salario mínimo, con lo cual, después en cada provincia debe negociarse un salario. A su vez, la Nación estipula una suma fija, que es de $4.840, repartidos en 4 veces, que empezaría a pagarse en marzo, en montos de $1.210 cada 15 horas cátedra. Es una ayuda para tratar de resolver a nivel país el tema salarial”, contó Accornero, señalando que esto se suma al incentivo docente que ya se paga.
Por su parte, Soledad Correa, secretaria general de UTEP, sostuvo que “la prioridad de este Frente Gremial es paritarias docentes por primera vez en 37 años de democracia”. “Necesitamos paritarias provinciales, que es el ámbito donde podemos discutir los trabajadores con el Ejecutivo provincial, que reclamamos hace décadas”, añadió Correa durante la conferencia de prensa.
Otro punto que remarcó la gremialista, que ya fue solicitado la semana pasada a través de una nota al Gobernador, es la ejecución de la cláusula gatillo que Alberto Rodríguez Saá prometió el año pasado. “Que el Gobernador de la provincia cumpla con la cláusula gatillo del 2019 y, a partir de ahí, empezar a charlar con cifras que vayan al básico, que sean blanqueadas y lograr así un básico salarial docente que sea significativo e importante”, manifestó Correa.
En San Luis, explicó la gremialista, el piso salarial para un docente que tiene un cargo, o 15 horas cátedra, es de $31.600. De ese monto, solo $12.860 pertenecen al salario básico, lo que corresponde a un 40,69%. En otras provincias, el básico constituye alrededor del 70% del salario, lo que se traduce en mejores aportes previsionales y aguinaldos.
Como ejemplo, la secretaria general de UTEP contó que un cargo de maestra de grado incluye casi $13.000 no remunerativos. Estas cifras “en negro”, como son conocidas habitualmente, afectan a todos los docentes de la provincia y son la razón por la cual sus aportes jubilatorios son tan bajos, mientras que los aguinaldos nunca llegan al 50% de un salario mensual.
“Por eso, el pedido de este Frente Gremial es partidarias para discutir el salario y la composición del mismo y terminar de una vez por todas con estos anuncios unilaterales. No queremos cifras en negro, sí que vayan al básico y cumplimiento de la cláusula gatillo”, agregó Correa.
“No estamos de acuerdo con las sumas fijas. Queremos que todos los aumentos que se vayan a otorgar sean dados al básico. Es la única forma de que nosotros podamos estar contentos o de acuerdo con cualquier aumento”, dijo Borjas Orozco, secretario de la Asociación del Magisterio de Enseñanza Técnica (AMET), quien también reclamó la aplicación de la cláusula gatillo. Orozco también consideró que el aumento de sueldo para este año debería ser, “como mínimo”, del 40%.
“Este Frente Gremial va a luchar incansablemente por lograr las primeras paritarias docentes en San Luis y para que el salario del maestro le gane a la inflación. Es el compromiso que ha asumido el Frente Gremial”, concluyó Correa.
Otros temas
El Frente Gremial también apuntó que quieren debatir temas como el doble cargo docente, la precariedad de contratos que ofrecen las escuelas autogestionados y generativas; y los casos de docentes que han sido designados hace meses, pero cuyos decretos no han salido y por ende todavía no han podido cobrar ni un solo sueldo; y las demoras en el pago del incentivo docente a los docentes privados.