Ante la Justicia y mediante un posteo en Facebook, Victoria Miranda, jugadora del equipo de fútbol femenino de Inclusión Social, denunció públicamente que sufrió acoso por parte del entrenador de arqueros. A esto se suma una denuncia por discriminación y daño psicológico en contra del director técnico y encargados del proyecto de fútbol femenino, ya que Victoria, luego de quejarse del acoso y denunciar ante ellos el hecho, fue pasada del merendero en el cual trabajaba a parcela.

La persona denunciada por acoso es Diego Torres, el entrenador de arqueros del equipo. La denuncia fue realizada a través del portal de la Justicia provincial a fines de abril y, al día de la fecha, Victoria no ha sido convocada a ratificarla. “Esto empezó el año pasado, me miraba de forma rara, se acercaba y me decía cosas raras, siempre insinuando algo, con alguna otra cosa. El año pasado me asentó toda la mano en mi cintura, supuestamente acercándose para decirme algo sobre el equipo o qué sé yo. Por eso que yo, desde año pasado, me alejo. Donde estaba él yo me iba para otro lado”, contó Victoria, relatando el comienzo del acoso.

“Este año, en marzo, nos fuimos de viaje a Buenos Aires con el equipo y él estaba allá. En una de esas, entra una de las habitaciones, de otra chica, con una linterna, a alumbrar, cuando no se puede meter un hombre en una habitación y menos si es un equipo femenino. En la última cena antes de volvernos, él se acercó, pasó por atrás mío, y se va para donde lo habían llamado. Después cuando vuelve él arrastró toda su mano por mi brazo, cuando yo estaba en musculosa. Fue como una caricia y me sentí re incómoda. Mi compañera me miró y me preguntó, ‘¿estás bien?’”, continuó Victoria, relatando los episodios.

Ante esta situación, Victoria recurrió a uno de los encargados del proyecto de fútbol femenino de Inclusión Social, Víctor Sosa. “Me dijo que iba a tomar cartas en el asunto, que era serio, que lo iba a tomar como se debía”, contó la joven. Dos semanas después, Sosa convocó a Victoria a la Colonia (el predio de Inclusión Social), donde le pidió que le cuente lo ocurrido a otro de los jefes del proyecto, Luis Spagnolo. De acuerdo a Victoria, le pidieron que “haga una separación del fútbol y lo que le pasó”, y le dijeron: “damos por terminado el tema acá”.

“No les importó lo que les dije. Desde ese día pasa una semana y me sacaron del grupo, me corrieron sin un motivo, no me llamaron para hablar conmigo, no me dijeron nada, nada, nada. Me hicieron un daño tremendo, psicológico y mental”, contó Victoria, quien estaba a cargo de un merendero y fue designada para empezar a trabajar en parcela, además de ser separada del equipo de fútbol. El mismo destino sufrió una amiga que la acompañó en todo este proceso.

“Ustedes se buscaron eso”, fue, según contó, las palabras de Sosa cuando Victoria reclamó en Secretaría Privada del Ministerio por el pase a parcela. Tras mover cielo y tierra, contactando a la secretaria de Deportes, Cintia Ramírez, y al ministro de Desarrollo Social, Nicolás Anzulovich; la joven y su amiga retuvieron sus puestos de trabajo habituales, pero nunca lograron volver al equipo de fútbol.

Por todo lo sucedido, Miranda denunció a Sosa, Spagnolo y al DT del equipo, Miguel Carrizo, ante el Inadi por discriminación y daño psicológico. Al igual que en la Justicia provincial, Victoria, quien proveyó a este medio copias de ambas denuncias, no ha sido llamada a ratificarla ni recibido novedades sobre el avance de la causa.