En un contexto de recesión por la baja en el consumo y la caída mes a mes de la coparticipación federal, una funcionaria del Gobierno de la Provincia sostiene que se continúa con la política de ajuste, pero que se cumplen con todas las obligaciones financieras que tiene el Estado.

Eugenia Sosa Herrera, directora de Finanzas y Recursos del Ministerio de Hacienda e Infraestructura Pública comunicó la coparticipación de julio tuvo caída interanual en términos reales, del 18,5% con un acumulado que se sostiene en un negativo del 10%. En julio, San Luis recibió $106.972 millones por coparticipación federal, leyes complementarias y compensaciones.

Debido a la recesión, la funcionaria mencionó que la actividad económica ha disminuido en aproximadamente un 5%, generando un impacto directo en el consumo.

“Estamos atravesando un momento macroeconómico en un estado de recesión”, declaró Sosa Herrera, señalando que esta caída del consumo afecta fundamentalmente la recaudación del Impuesto al Valor Agregado (IVA), así como los impuestos a las ganancias y bienes personales. Según su análisis, se observa que nominalmente “la recaudación de julio ha sido inferior a la de junio, que también fue menor que la de mayo”.

Con estas circunstancias, la directora enfatizó la importancia de equilibrar ingresos y gastos. “Nos manejamos con el presupuesto y estamos esperando que los recursos alcancen para cumplir con todas las obligaciones. Los recursos siempre son escasos y las necesidades son ilimitadas”, agregó Sosa Herrera, enfatizando que es crucial establecer un orden de prioridad para cumplir los compromisos del Estado.

El ajuste fiscal se ha vuelto una necesidad ante el déficit que enfrenta la provincia. “Estamos deficitarios porque estamos ajustando. Se han tomado muchas medidas, ya que la Provincia tuvo que hacerse cargo de otros gastos que estaban presupuestariamente contemplados para ser cubiertos con fondos federales, como el subsidio del transporte automotor y el incentivo docente”, explicó. Esta reestructuración obligó a realizar ajustes en otras áreas para contener el gasto.

A pesar de la caída en la coparticipación y del impacto en la recaudación interna, Sosa Herrera aseguró que el Gobierno provincial cumple con todas sus obligaciones fiscales. Sin embargo, advirtió que la recaudación del impuesto a los ingresos brutos (el más fuerte de la provincia) también sigue la misma tendencia a la baja, lo que repercute directamente en las finanzas locales.

Sobre las perspectivas para los próximos meses, la funcionaria aseveró que el equipo de Finanzas está trabajando con prudencia, proyectando flujos de fondos en función de la recaudación. “Aún no hemos tenido el impacto del regreso del impuesto a las ganancias y esperamos observar cómo evoluciona la situación”, concluyó Sosa Herrera.