Las demoras en las viviendas que se construyen en Juana Koslay, los problemas de transporte y el fracaso de la ordenanza del conductor designado son algunos de los temas que se trataron.

Ayer por la mañana, el intendente de Juana Koslay, Andrés Vallone, copió una de las mejores políticas de Enrique Ponce y realizó un desayuno a agenda abierta con la prensa local. 

El primero de los temas fueron las viviendas que el Gobierno ha construido en el municipio, pero que todavía no se entregan. “Las viviendas están totalmente finalizadas, en muy buen estado, y se está finalizando con algo de la parte de servicios, como cordones, compactación de las calles, interconexión de luces y alumbrado público. Y también se ha probado el sistema de cloacas y aguas”, dijo Vallone sobre el tema, señalando que las casas podrían entregarse entre el 20 y el 30 de este mes.

El Intendente también comentó que se ha hecho “una solicitud de mejorar el ingreso al barrio, atento a que está en una zona desfavorable al barrio porque es una zona desfavorable para el tránsito porque está sobre la autopista de Los Puquios, sobre una zona de curvas”. Este pedido probablemente se materialice en la construcción de una rotonda para el ingreso al nuevo barrio.

A su vez, este nuevo barrio no hará más que incrementar al problema que afronta el municipio para lograr contar con un servicio de transporte urbano, con dos llamados a licitación que han quedado desiertos. Por ello, Vallone ha mantenido reuniones con la empresa Polo, que brinda el servicio interurbano de pasajeros, y el Gobierno provincial para tratar de encontrar una solución al problema. Desafortunadamente, esto todavía no ha sido posible debido a la falta de rentabilidad que tendría el servicio, por lo que se mantendrán nuevos encuentros.

“También entendemos que el sistema de transporte interurbano hoy no cumple”, dijo Vallone, refiriéndose a un estudio que realizó el municipio sobre el servicio. “Y vimos que el estado es pésimo, de suciedad, de vidrios rotos, falta de mantenimiento, los propios choferes nos comentaban que a veces trabajan más de 10 horas en los turnos”, comentó el Intendente.

Ante este panorama, el municipio contempla avanzar con un servicio diferencial, “que sería una solución a medias, porque tendría un costo más alto, pero llegaría de manera mucho más rápida a la ciudad, con un servicio que tenga calefacción, aire acondicionado y que sea cómodo”. De igual manera, el Intendente reconoció que este servicio “sería un anexo al sistema que ya funciona” y que hay “que seguir buscando las alternativas necesarias para un problema que hoy no tiene solución”.

Vallone también fue consultado por la ordenanza del conductor designado, una norma que parecía que iba a revolucionar el cuidado de los jóvenes que salen a boliches bailables, pero que al final quedó en absolutamente nada. Reconociendo que “no ha avanzado”, el jefe comunal sostuvo que “esto tiene tres patas, el municipio que tiene que llevar adelantes los controles y el programa; la policía que tiene que realizar los controles en la ruta, donde ha habid coordinación y ahí no está el problema; y la tercer pata son los boliches y si no tenemos el acompañamiento y el compromiso de los boliches digamos que es prácticamente imposible porque no se puede aplicar”.

“No hemos tenido hasta ahora el acompañamiento. Hemos tenido varias reuniones con ellos. Por ahí existe el miedo que es más un control hacia ellos que un aporte para cuidar la vida y la salud de los jóvenes”, agregó el Intendente, subrayando que el principal problema es que “ordenanza habla de que tiene que ser voluntario”. Y a pesar de que esto claramente no está funcionando, Vallone igual sostuvo que “si es voluntario seguramente va a ser mucho más exitosa la ejecución”.

Por último,
el jefe comunal destacó la puesta en marcha de la Escuela Administrativa Municipal, la primera de este orden en la provincia, mediante la cual 48 empleados de planta permanente y 26 tendrán la posibilidad de capacitarse y acceder a nuevos cargos.