El primer día de trabajo no sólo es un gran desafío para quien ingresa a una empresa, sino que también para quienes son parte del equipo al que se incorpora.
El primer día de trabajo no sólo es un gran desafío para quien ingresa a una empresa, sino que también para quienes son parte del equipo al que se incorpora esta nueva persona, ya que debe existir un proceso de inducción atractivo y que logre no sólo presentar a la compañía, sino que cautivar el interés del trabajador, para que éste se sienta motivado y comprometido con este nuevo puesto.
Quien está ingresando a un nuevo equipo de trabajo, debe conocer bien el tipo de organización a la que formará parte. Desde un primer momento debe sentir que ya pertenece a la oficina, conociendo quienes la componen, las tareas que realizan cada uno de ellos, las labores que éste deberá cumplir en función a su área, el día a día y por supuesto, saber lo importante que es él para esta organización.
El proceso de inducción puede realizarse de manera formal, con cursos de capacitación, presentaciones en PPT o bien, de manera informal, en la que el primer acercamiento es con el área a la que se incorpora y de manera flexible, ir presentándole sus tareas a cumplir y al resto de la organización. Para cualquiera de los modalidades de inducción, Trabajando.com te entrega a continuación un modelo básico, que puede ser utilizado por quienes están hoy recibiendo un nuevo integrante en su lugar de trabajo.
Primera etapa: la bienvenida
Acá la idea es entrar en confianza y dejar que el nuevo empleado se familiarice y se sienta cómodo. Para ello es bueno tocar temas que no sean del ámbito laboral, con el fin de lograr mayor empatía. Es importante conocer bien al equipo de trabajo y lograr que quien se integra recién al área, se sienta parte de ésta de inmediato.
Segunda etapa: presentar la organización
Se puede hacer un pequeño resumen de la historia de la empresa, su visión, misión y valores que la componen, con el fin de orientar al empleado y que éste conozca los objetivos que se tienen en colectivo.
Tercera etapa: presentación de las otras áreas
Un paseo por la oficina, donde el nuevo integrante pueda habituarse a los espacios, caras y así posiblemente crear una instancia de conversación con otras áreas de la empresa. Esto es algo que marcará la diferencia, ya que en algún momento el empleado deberá tratar con otras unidades y ya se sentirá más familiarizado con ellos.
Cuarta etapa y final: entrega de tareas y evaluación
En esta etapa es cuando se le entrega alguna de las tareas que deberá estar realizando durante su permanencia en el cargo, y en la medida que éste las va llevando a cabo, hacer una revisión y pequeña evaluación del trabajo terminado, para que desde ya vaya perfeccionando y entendiendo cómo opera el área, con el fin de seguir una misma línea.
Pablo Molouny, gerente general de Trabajando.com Argentina agrega que, “es importantísimo integrar desde el primer momento a quien ingresa a la organización y hacer los mayores esfuerzos para que se sienta cómodo desde el principio”.