Tras las duras críticas que realizó el día de ayer el abogado de Urkupiña, Guillermo Strazza, el director de Obras Privadas, Juan Piran, dio la versión oficial sobre la situación que atraviesa el trámite de aprobación definitiva de los planos del loteo de esta asociación boliviana. “La Municipalidad ha hecho todo lo posible para regularizar la situación del loteo, pero si ese trámite aún no se ha concretado es porque los responsables nunca cumplieron con la documentación requerida y, desde hace más de un año, exigen mediante extorsiones e injurias que la municipalidad viole la legislación vigente, cosa que no va a suceder”, sostuvo Piran.

Desde la Municipalidad también manifestaron que “integrantes de la comunidad boliviana presionaron a funcionarios municipales con realizar una conferencia de prensa y una posterior movilización, si la municipalidad no accedía a entregarles la aprobación definitiva de los planos del loteo sin antes cumplir con la documentación requerida”.

Además, la Municipalidad comparó la la situación del loteo Urkupiña con la que se generó hace dos años con la aparición en San Luis de los comercios conocidos como “saladitas”, “cuyos propietarios en su mayoría de origen boliviano, ‘patrocinados’ por el abogado Guillermo Strazza, procesado en Santa Fe por el delito de extorsión, realizaron una serie de protestas para evitar la clausura de comercios que no contaban con documentación habilitante ni tampoco con comprobantes de compra de la mercadería ofrecida para la venta”.

“Nos llama mucho la atención que este reclamo infundado y extorsivo ocurra a dos días de la elecciones en coincidencia con la aparición en la ciudad de gente del oficialismo provincial entorpeciendo los servicios públicos. Ahora nos encontramos con esto, pero la Municipalidad deslinda toda responsabilidad por el tiempo transcurrido en este expediente y asegura que la demora fue causada por el incumplimiento en la presentación de la documentación que exige la ordenanza”, dijo Piran.

“La municipalidad siempre recibió a las personas que solicitaban las aprobaciones definitivas de la urbanizacion, pero esas personas, no solo no acompañaron en tiempo y forma los requerimientos, sino que además en vez de completar el trámite, se dedicaron a presionar y difamar a los funcionarios para obtener una aprobación irregular”, continuó el funcionario municipal.

Más allá de las críticas, Piran manifestó que la “Dirección de Catastro y Obras Privadas flexibilizó ciertos parámetros para facilitar que este emprendimiento pudiera realizarse”, entregándole a Urkupiña “la factibilidad que fija la ordenanza que autoriza al constructor a realizar toda la infraestructura necesaria”. “Le corresponde al constructor llevar a cabo esa obra. Una vez realizada la misma, se entregarán los planos definitivos tal como marca la ordenanza”, sostuvo el director municipal.

“Entonces esta Dirección ha cumplido todos los trámites legales que corresponden y está en manos de los responsables de la urbanización cumplimentar los próximos pasos para finalizar el procedimiento de entrega de planos definitivos. La municipalidad pone a la vista de las familias propietarias de parcelas en ese loteo las actuaciones con el objeto de llevarles tranquilidad, pero aclara que no cede ni permite actitudes extorsivas ni agraviantes de ciertos personajes, que en lugar de trabajar de manera idónea para tramitar dicha urbanización legalmente, se dedicaron a entorpecer y difamar para disimular el mal manejo profesional de sus obligaciones”, concluyó el director de Obras Privadas.