En lo que va de 2022, la Municipalidad de San Luis sumó más de 3.000 ejemplares al arbolado público de la ciudad. El número se alcanzó a través de diferentes acciones encaradas por la Secretaría de Medio Ambiente, algunas a cargo del propio Municipio y otras realizadas en conjunto con instituciones de la sociedad civil y vecinos.
“El programa Una taza, un árbol nos permite llegar a todos los puntos de la ciudad. En este programa llevamos entregados más de 800 árboles. El vecino se puede inscribir a través de la página de la Municipalidad y nosotros le llevamos de manera gratuita uno o dos ejemplares para la vereda. También comunicarse vía telefónica 2665041518. Nos llaman o envían un WhatsApp y nosotros le decimos los requisitos para inscribirse en el programa y recibir un árbol”, dijo Soledad Arrieta, directora de Gestión y Desarrollo Forestal Urbano.
Otro de los ejes de trabajo son las escuelas de la capital y las plantaciones conjuntas que se realizan una vez por semana. “Nos llegan notas, pedidos de parte de ellos para que intervengamos y hagamos plantaciones en conjunto con los chicos. Con las escuelas, en lo que va del año, hemos plantado 500 ejemplares”, detalló la funcionaria.
El trabajo en los barrios, con asociaciones vecinales también rinde frutos. El Mirador del Cerro III se plantaron 180 ejemplares de fresno, y en Amppya otros 80 ejemplares. Para las próximas dos semanas se prevé trabajar en los barrios Cantisani y Mirador del Cerro I y II.
El cuarto frente de esta política ambiental es el Plan de Forestación que las cuadrillas municipales llevan dentro de las cuatro avenidas. Esta acción ya repobló 900 tazas vacías en la zona y antes de fin de año se prevé alcanzar 1.400.
Esta acción coordinada tuvo como paso previo la realización de un censo en el arbolado de la zona centro. “El censo lo hicimos a comienzos de este año para relevar todas las tazas vacías dentro de las cuatro avenidas. Esto surge por la problemática del paraíso, que ha sido afectado por una enfermedad que les provoca irremediablemente la muerte. El paraíso comprende una 80% del total de arbolado urbano. Nos urge repoblar todas las tazas vacías con árboles también pensando que es un aliado en la lucha contra el cambio climático y ahora que se viene el verano”, explicó Arrieta.
En cuanto a las especies a plantar, la directora declaró que depende del tamaño de la vereda. “Hicimos una clasificación de tres tipos de vereda y cada una tiene su especie. La vereda chica lleva crespón, ligustro áureo, ciruelo de jardín y pezuña de vaca. Una vereda mediana, de 2 a 4 metros, lleva fresno americano o fresno dorado. En las veredas grandes, de más de 4 metros hibisco, palo borracho, y se utiliza más en avenidas”, concluyó.