K]arim Alume y Victoria Rosso fueron los diputados nacionales de San Luis que votaron en contra del proyecto ley de regulación del acceso a la interrupción voluntaria del embarazo y a la atención postparto. La iniciativa obtuvo media sanción de la cámara baja luego de más de 20 horas de sesión y se aprobó por 131 votos a favor, 117 en contra y 6 abstenciones.

Es importante mencionar que tanto Rosso como Alume forman parte del Frente de Todos, el bloque del oficialismo que impulsó la iniciativa que obtuvo la media sanción. Cabe recordar que su compañero de bloque Carlos Ponce votó a favor. Por su parte, los legisladores radicales, Alejandro Cacace y José Riccardo también votaron a favor.

Rosso

“No pretendo poner en discusión si estamos hablando o no de una persona. Sí creo indiscutible que estamos hablando de una vida, un individuo de la raza humana y que es diferente a quien lo gesta. Creo que la voz de los argentinos, los legisladores que nos precedieron, los argentinos que están en las calles en todo el país, en su mayoría sostiene que el valor de la vida no puede estar condicionado a un plazo de 14 semanas”.

“Hay consideraciones del proyecto que acompaño y otras que no. Acompaño y estoy segura que las mujeres, las parejas, todos los habitantes de nuestra Nación, tenemos derecho a planificar si queremos o no tener hijos y cuándo tenerlos, pero eso no creo que nos dé derecho a elegir qué vida continúa, según su desarrollo y cuál no según una semana, y si se criminaliza a una mujer o no después de ese momento. Tengo que advertir además que no lo acompaño porque el Estado va a seguir ausente en lo que respecta a las mujeres más vulnerables como son los casos de violación, abortos por cuestiones de salud. ¿Dónde se encuentra el acompañamiento emocional en estos proyectos? ¿Dónde está la concordancia con la ley que establece que se actuará de oficio en los casos de violación a menores de 18 años?”, siguió la crítica de la diputada.

Alume

El diputado abriĂł su discurso calificando como maravilloso que los jĂłvenes militen tanto por la postura a favor como en contra del proyecto.

“Lo que estamos tratando es un proyecto que consagra un derecho subjetivo dejando en segundo plano el derecho de acceso a la salud y desentendiĂ©ndose de la escandalosa desigualdad con que los poderes judiciales de nuestro paĂ­s tratan este tema. No podemos acompañar un derecho subjetivo que se faceta más triste y en su amplitud de ejercicio da la posibilidad de que una persona gestante, una pareja, una familia interrumpa un embarazo por haber sido diagnosticado con una discapacidad o decide interrumpir un embarazo por haber sido diagnosticado con sĂ­ndrome de down”, afirmĂł Alume.

“Este proyecto no nos hace una sociedad más justa, no nos hace una sociedad más igualitaria. Sí, nos transforma en una sociedad más individualista. Por sobre todas las cosas, nos transforma en una sociedad más cruel”, cerró el legislador su discurso.